Locales | 05 Jul Una larga cola —como ya se está volviendo casi habitual— se formó ayer en el puente internacional José Artigas, debido al mayor número de vehículos que pretendían pasar hacia Argentina. «El problema es la falta de funcionarios en Migraciones», dijo a EL TELEGRAFO una fuente vinculada a la administración del puente.
Actualmente, hay seis funcionarios efectivos y dos «en comisión» que están cumpliendo las tareas del control migratorio entre Uruguay y Argentina, un número «insuficiente», a juicio de nuestra fuente, que recordó que años atrás, y con menos tránsito, hubo 12 funcionarios efectivos, con lo que los turnos se cubrían con mayor facilidad y presencia. «Pero se fueron jubilando y no llenaron esas vacantes», dijo el informante, agregando que «ahora son dos o a veces tres funcionarios por turno, y además de estar en las casetas recibiendo la documentación de los pasajeros, también tienen que hacer trabajo administrativo», señaló.
Además, destacó que «los controles de migración son estrictos, hay que llenar todos lo papeles y registrar ingresos y egresos. Eso lleva unos cinco minutos por vehículo, dependiendo de la cantidad de pasajeros». Además, se trabajó en un solo carril, por el cual pasaba tanto el tránsito vecinal como el de turistas.
La cola de motos, autos, camionetas y camiones era ayer particularmente extensa a media tarde, y se mantuvo así durante más de dos horas.