Paysandú, Sábado 12 de Julio de 2008
Locales | 05 Jul El ministro de Industria, Energía y Minería, Daniel Martínez, dijo que para el próximo año el país contará con un 6% de energía generada en base a fuentes renovables no tradicionales, además de la generación hidráulica que tiene carácter renovable y es de larga tradición en nuestro país.
«Trataremos de no generar energía eléctrica en base a hidrocarburos más allá del 2015 ó 2020. Ese es el sueño dorado, coincidimos en eso, pero hay que dar respuestas inmediatas que el país requiere; no es cuestión de voluntarismo o de hablar más alto o más bajo, son datos objetivos», dijo Martínez ante la Comisión de Industria del Senado.
La meta del ministerio es que para el 2015 Uruguay cuente con 250 megavatios de energía eólica, 200 megavatios de biomasa y un crecimiento del orden de 50 megavatios en energía hidráulica.
El secretario de Estado informó que en este momento hay una primera etapa de incorporación de fuentes renovables no tradicionales. «Para fin de año vamos a tener 16 megavatios eólicos —10 megavatios de UTE que están en proceso de instalación, a la espera de la grúa, más los 6 megavatios cuya entrega ya se está coordinando por parte de un privado que ganó la licitación— hay también unos 60 megavatios de biomasa, de los cuales 30 son producto de la construcción de una planta de generación con cáscara de arroz, en Treinta y Tres, y de dos plantas con residuos de aserradero en Tacuarembó y Rivera».
A esto debe agregarse 24 megavatios correspondientes a la licitación que se abrirá en los primeros días de julio, que son en su su totalidad en base a energías renovables.
«Podemos asegurar -es una realidad no cuestionable- que entre fines del 2006 y el 2009, vamos a contar con un total de 6% de energía generada en base a energías no convencionales, además de la generación hidráulica que tiene carácter renovable y es de larga tradición en nuestro país», sostuvo.
A modo de ejemplo y reconociendo que no es totalmente comparable, recordó que el programa Proinfa llevado a cabo en Brasil había establecido una meta del 3%, que no se ha podido alcanzar «a pesar que comenzaron diez años antes que nosotros».
«Un 6% de energía renovable no tradicional parece poco, pero es un número enorme», dijo por su lado el director nacional de Energía y Tecnología Nuclear, Ramón Méndez, para luego explicar que «Brasil, por ley, aspira a llegar al 3% en el año 2015, pero está atrasadísimo y su propio gobierno así lo reconoce». La media para todos los países europeos, que son los mayores inversores en este tipo de energía, es del 2%. «Se podrá decir que con lo pequeño que es el Uruguay de tamaño, es más fácil crecer. Efectivamente, eso es verdad, pero en términos relativos el porcentaje no deja de ser interesante», añadió Méndez.
«Este es un dato de la realidad, aunque tenemos claro que hay que acelerar este proceso porque nos permite avanzar en la diversificación de la matriz, en base a energías que dependen de nuestra propia capacidad. Por tanto, en un sentido estratégico éstas no sólo aportan en cuanto a la diversificación, sino también a la hora de darnos más independencia. Entonces, para el 2009, con este tipo de generación -y teniendo en cuenta que hasta el 2005 el porcentaje era cero- habrá un 6% en base a fuentes renovables no tradicionales», agregó.
SEIS CONTRATOS Y MáS
Por primera vez en el país hay generadores privados vendiendo energía a UTE. Ya se han firmado seis contratos y hay otros en proceso, entre los que se encuentran el de Azucarlito, que también venderá a precio spot, y el de Alur, que va a comenzar a generar a partir de la quema del bagazo.
El director de Energía informó que de los seis contratos vigentes, «tres se presentaron a la licitación de biomasa —en Cerro Largo, Tacuarembó y Treinta y Tres—, hay un generador de energía eólica que ya está trabajando y otro en proceso de instalación. Asimismo no podemos olvidarnos de Botnia, que entrega energía a UTE diariamente. Por otro lado, hay un generador muy interesante -por lo diferente- que es Senda, de Branáa, que no entra con un contrato de largo plazo, sino que vende energía al precio spot. La generación privada de electricidad ya es una realidad en el país; comenzó el año pasado y está creciendo», afirmó.
«Nuestra estrategia es que haya generadores privados porque la generación eléctrica es una tarea muy grande que no puede llevar adelante sólo el Estado. Sin embargo, estamos tratando de que estos ingresos sean en base a contratos firmes de largo plazo, lo que da garantías tanto al consumidor y al distribuidor, como al generador. El inversor tiene todo el derecho de vender energía cuando le conviene -básicamente con el precio spot- pero eso no nos da la garantía de que tengamos energía cuando la precisemos. Entonces, queremos impulsar contratos de largo plazo. Es más, así lo hemos hecho hasta ahora y se ha manifestado mucho interés, ya que se han presentado muchos oferentes. Nosotros ofrecemos contratos firmes a diez, quince o veinte años con un precio fijo, por supuesto actualizado con alguna paramétrica», agregó Méndez.
BIODIESEL
Según informó el ministro Martínez, se pretende introducir energías renovables en el sector de los combustibles para «cumplir las metas legales, tanto en relación al etanol como al biodiesel, de manera sustentable y no competitiva con los alimentos».
«Compartimos la preocupación que hace poco tiempo formó parte de un debate de primer orden en la órbita de la FAO. Cabe destacar la meta legal garantizada por Ancap y la producción de privados, controlando la cantidad de productos, aspecto fundamental tanto a nivel de la pequeña producción -como está permitido por la legislación- como en forma general. Este es un aspecto fundamental, porque las malas experiencias en cuanto al biodiesel terminan desprestigiando la alternativa que entendemos es fundamental para el país», añadió.
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