Paysandú, Viernes 25 de Julio de 2008
Locales | 20 Jul (Por Enrique Julio Sánchez, desde Estados Unidos). Sorpresivamente, para la opinión publica de un día para el otro, un gigante gringo cedió ante el empuje del euro. Anheuser-Busch, líder en el mercado con las cervezas Budweiser fue comprada por la belga InBev S.A. por alrededor de 52.000 millones de dólares, esto es 70 dólares por acción.
Cuando se complete la operación, uno de los mayores íconos de la cultura gringa, junto con la Harley Davidson, habrá pasado a manos extranjeras, lo que por cierto provocó de inmediato reacciones adversas entre los consumidores. En pocas horas comenzó a circular en los sitios de Internet que se oponen la imagen de una botella de Budweiser con la leyenda «Fabricada en casa, con propiedad en el exterior».
Anheuser-Busch, una compañía creada hace 150 años por Eberhard Anheuser y potenciada junto a su yerno Adolphus Busch, que sobrevivió a la «ley seca» vendiendo una variedad de productos, incluyendo helados y cerveza sin alcohol, domina el 46% del gigantesco mercado gringo, con las marcas Budweiser, Busch, Michelob y Rolling Rock. Muy por detrás se ubican la sudafricana SAB Miller con el 25% del mercado (Miller e Icehouse) y la canadiense Molson Coors con el 20% (Molson y Coors).
Ahora, esta venta da origen a la más grande cervecera del mundo (InBev domina ya Latinoamérica), pero —lo que deja un sabor amargo en los estadounidenses— deja al mercado interno en manos extranjeras, pues como se aprecia las tres principales compañías son extranjeras.
No fue éste el único sacudón económico de la semana. Tampoco el más preocupante. Los casinos, para quienes la temporada veraniega es la de mayores ganancias, reportaron caídas en sus ingresos. Al revelarse los datos estadísticos comparativas de mayo y junio de este año con 2007, los casinos de Las Vegas obtuvieron 16,4% menos de ganancias y los de Atlantic City, aquí en New Jersey, 11%.
Y la cadena de cafeterías Starbucks anunció el cierre de 616 de sus 7.087 establecimientos, dejando sin empleo a 12.000 personas.
Pero tampoco éstas ha sido las peores noticias económicas de la semana. Dos gigantes de préstamos hipotecarios, Fannie Mac y Freddie Mac, los apodos con que se conoce a la Federal National Mortgage Association y la Federal Home Loan Mortgage Corp., están al borde de la bancarrota y el gobierno ha pedido al Congreso mano libre para impedir su caída, lo que podría significar miles de millones de dólares a los contribuyentes.
Y aunque los especialistas señalan que no esperan una situación similar a la de 1990-92, cuando 834 bancos a lo largo de los Estados Unidos quebraron, otros bancos se encuentran en problemas en Wall Street, fundamentalmente ante una creciente ola de rumores de problemas financieros.
La situación afecta fundamentalmente a National City Corp., Washington Mutual (conocido como Wa Mu) y Sovereign Bankcorp, entre otros.
No obstante, por si todo esto no fuera ya preocupante, un estudio de Ernst & Young, dado a conocer la semana pasada, puso preocupación en el futuro de millones de estadounidenses hoy en edad activa, pero que en pocos años más accederán a su retiro. La conclusión es que el estadounidense promedio deberá reducir su nivel de vida en casi un cuarto si es que quiere tener una vejez más o menos tranquila. Y aquellos que están cerca del retiro (a unos 7 años), deben reducirlo hasta en un 37%.
Lo que ocurre es que la jubilación solidaria se ha ido reduciendo paulatinamente, por lo que el ahorro para la vejez depende en gran parte de los propios empleados, que se han afiliado a compañías del mismo estilo que las AFAP en Uruguay.
En todo este panorama oscuro, una buena noticia: la gasolina descendió un centavo de dólar, debido a la mayor baja del crudo en una sola semana en los últimos tres años, con un precio entre 3,79 y 3,99 (en el norte de New Jersey), según las gasolineras.
Pero aunque no se vive una crisis económica grave, la situación sí es preocupante y por muchos aspectos. Por ejemplo, en el caso de los inmigrantes, los indocumentados no pueden siquiera imaginarse su futuro retiro, en la medida que no pueden acceder ni a los planes de jubilación solidaria del gobierno ni a las financieras privadas con planes de retiro.
Qué pasara con ellos no es una pregunta que esté en la agenda política, pero sí en ellos mismos y en toda la comunidad latina.
Por otro lado, no hay que pensar que la crisis arrastrará solamente a Estados Unidos. En un mundo globalizado como éste, si el dólar no se recupera y si la economía no encuentra aire puro pronto, el mundo entero podría verse arrastrado a una severa crisis económica. Solo un ejemplo: en las financieras hipotecarias hoy al borde de la bancarrota, buena parte del capital proviene del extranjero.
Y hay miles y miles de otros casos semejantes. Una crisis económica de Estados Unidos envolvería una crisis internacional cuyas consecuencias los especialistas ni siquiera se atreven a mencionar.
Una consecuencia obvia para los países latinos sería la reducción de las remesas desde tierras gringas, y éstas suman una cifra impresionante, que obviamente ayuda a las escuálidas economías de nuestros países.
La esperanza de una pronta recuperación se mantiene intacta y las miradas apuntan directamente hacia el futuro presidente. Sea McCain u Obama, tendrá ante sí la oportunidad de convertirse en héroe o villano, en una nación donde la historia cotidiana siempre tiene algo de Hollywood.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Jul / 2008
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com