Nacionales | 26 Jul La empresa portuguesa Portucel negocia con el gobierno su instalación en el país, con una inversión de 3.000 millones de dólares. Sin embargo, ya definió que construirá su nueva planta de procesamiento de celulosa en el Este del país y el departamento elegido sería Rocha.
Con el desembarco de Portucel, nuestro país tendrá en breve cuatro plantas, dos de ellas avaladas por este gobierno. Botnia, Ence, Stora Enso y Portucel, pero el país tiene capacidad para más, según el gobierno. El intendente de Rocha, Artigas Barrios, confirmó a radio «El Espectador» que todo indica que Portucel se instalará en su departamento. Dijo que según la información que posee, la comisión técnica integrada por el gobierno y técnicos de Portucel trabaja en un memorando de entendimiento.
«Respecto a los parámetros que tendrían en cuenta para regir la instalación, todo me hace pensar que será en los límites entre Rocha y Maldonado, entre Maldonado y Lavalleja, pero cerca, porque hablan de ello. Cerca del área forestada, mucho más cerca que de la costa, porque es mucho más el traslado de madera que el de celulosa, porque cada 10 toneladas de madera creo que sacan una de celulosa. Por lo tanto tienen que estar cerca del área forestada, pero no pueden estar muy lejos del mar. Por lo menos, cuando conversaron conmigo, la idea de ellos era arrojar los efluentes al mar mediante un emisor subacuático porque la dilución allí es mucho mayor y porque no hay ríos de gran caudal, como el río Uruguay, y no quisieran enviar a lagunas, porque seguramente habría objeciones ambientales. Si bien en una inversión de ese tamaño no es obstáculo hacer 50, 60 o 70 kilómetros de tubería, tampoco pueden irse a 300 kilómetros. Si uno maneja esas cosas piensa que seguramente el lugar elegido sea, como yo le decía, en la zona del Noroeste de Rocha, o la zona Norte de Maldonado donde limita con Rocha», indicó Barrios.
El intendente confirmó que es una buena posibilidad para avanzar en el puerto de aguas profundas que necesita su departamento y no se descarta que la empresa se asocie para construirlo.
Por su parte, el ministro interino de Industria, Gerardo Gadea, explicó que se están desarrollando las gestiones con la empresa portuguesa para delinear cuáles serán los términos de la inversión para lograr un entendimiento de mediano plazo y beneficioso para ambas partes. Sostuvo que es probable que se otorguen beneficios impositivos o de zona franca al grupo inversor, aunque todavía no se ha plasmado en un acuerdo.
La radicación de Portucel implicará a Uruguay una inversión que podría alcanzar los 3.000 millones de dólares. Con esta cifra se convertirá en la mayor de la historia del país, superando a la recientemente instalada planta finlandesa Botnia.
Gadea subrayó que Uruguay tiene buenas condiciones para atraer inversiones extranjeras, y aclaró que nuestro país tiene capacidad para desarrollar la industria forestal. «Están los estudios realizados y todavía tenemos paño para plantearlo. Eso lo ha planteado el propio Ministerio de Ganadería, que ha hecho un estudio al respecto y todavía tenemos espacio como para seguir desarrollando la industria forestal en el Uruguay. El gobierno uruguayo va a tratar de dar apoyo institucional a esta inversión, y esos serán los términos del entendimiento, bajo las leyes que nosotros tenemos para los inversores extranjeros», señaló.
BUSCAN AMPLIAR Y CONTINUAR ACUERDOS
El director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Enrique Rubio, entregará al presidente Tabaré Vázquez un informe con los resultados de la evaluación de la primera etapa de acuerdos voluntarios para contener los precios en los productos de primera necesidad. Ahora, el objetivo de la OPP es continuar con la implementación de esta herramienta.
La próxima semana se anunciarán nuevos acuerdos, que se extenderán por dos meses. Juan Manuel Rodríguez, quien encabeza las negociaciones con los sectores que participan, expresó que los acuerdos alcanzados cuentan con una evaluación positiva y la meta es continuar con esta política.
El jerarca de la OPP afirmó que la próxima semana se confirmarán los primeros compromisos con las gremiales productivas, donde algunos precios se ajustarán, incluso con números a la baja. Esto se explica por el comportamiento de la formación de los precios dentro de cada cadena productiva, añadió Rodríguez.
Indicó que en algunos casos los precios de los insumos cayeron, lo que permitiría negociar una baja en los precios, debido a los nuevos resultados en los costos. En otros casos se deberá absorber el aumento de algunos ítems de la formación de los precios.
La ronda más polémica, integrada por la cadena de los granos —como las harinas y pastas—, que afecta productos muy sensibles, se reunirá la semana que viene. La intención es renovar el acuerdo con los precios actuales, o en su defecto, con el menor aumento. También se buscará sumar más productos a la lista actual.
Rodríguez explicó además por qué este nuevo acuerdo será de tan solo dos meses y no de tres, como el anterior. Dijo que en algunos sectores la tendencia de la materia prima es claramente descendente, por lo que, si se mantiene un precio acordado, es probable que se esté aceptando un valor que, eventualmente, podría bajarse.
COMBUSTIBLES NO SUBIRÁN SI PETRóLEO SIGUE ESTABLE
Ancap no prevé, por el momento, una modificación de las tarifas de los combustibles y en agosto se analizará la situación, aseguró el presidente de la empresa, Raúl Sendic. Aclaró que si el escenario actual de precios se mantiene —que se ubica en los 124 dólares el barril de petróleo— no se necesitaría una modificación de los precios.
Asimismo dijo que Ancap tuvo un fuerte impacto por el precio del barril de petróleo, en momentos en que éste se encontraba a 140 dólares, pero si el barril se mantiene en los precios actuales o disminuyera, se estaría solicitando al Poder Ejecutivo mantener las tarifas de manera de compensar esta situación por unas semanas más.
Agregó que algunos analistas estiman que el precio del barril de petróleo continuará disminuyendo hasta llegar a los 100 dólares. En ese marco aseguró que Ancap continuará con su política de bajar los precios cuando el barril de petróleo disminuye.