Locales | 31 Jul Hay siete trabajadores del Club Remeros que reclaman haberes impagos y el reintegro de quienes fueron enviados al seguro de paro y reconocimiento de las categorías laborales y salariales.
Afiliados al Sindicato de Trabajadores del Club Remeros, e integrantes de Fueci, la Federación de Empleados de Comercio e Industria, los trabajadores dijeron a EL TELEGRAFO que realizan un paro por tiempo indeterminado porque «no surge el diálogo por parte de la directiva del Club» para solucionar los temas conflictivos.
Angelina Rodríguez, Marcela Méndez y Carlos Curbelo, integrantes de Fueci, señalaron que lo que piden es «el reintegro de los dos profesores enviados al seguro de paro, porque sus horas están siendo dictadas por otros dos profesores y que se cumpla el convenio». Los profesores que están trabajando no son nuevos ingresos a la planilla, sino que siendo funcionarios del club tomaron las horas de trabajo que quedaron libres.
AGUINALDO Y SALARIO VACACIONAL
Sobre el convenio, especificaron que «no les pagaron el aguinaldo, pese a que le cobran a los socios una cuota para tal fin. También dice el convenio que el aguinaldo de diciembre es doble, pero no se paga. También les deben salarios vacacionales, les pagan el salario en varias veces, no les respetan las categorías y cobran todos como peones a pesar que algunos trabajan en la parte de calderas. Tampoco les pagan antigüedad, que está en el convenio».
«El agravante también es que a los profesores se les descuenta desde diciembre un porcentaje, en acuerdo con los profesores, por la deuda del club en el BPS, y se le pidió al club que demostrara que efectivamente utilizó esos dineros para pagar esa deuda. Estamos a la espera de una respuesta», señalaron.
Consultados sobre qué argumenta el club, dijeron que «no hay diálogo. Fuimos al Ministerio (oficina de trabajo) y a todos los planteos dijeron que no. Por el club fueron Violeta Saldivia, como la asesora legal, y una directiva. Pero los responsables mismos no van, que son Sánchez y Norbis».
Por su parte Carlos Curbelo, uno de los trabajadores de mantenimiento en el sector de la caldera, dijo que «cuando nosotros salimos de paro, Sánchez y Norbis salieron a buscar changarines para atender la caldera, y eso es muy delicado, hay que ser medio baqueano». Señaló que «son cinco personas, y les pagan 250 pesos por día. A nosotros nos pagan 140 pesos y tenemos salarios impagos».
Afirman también que la cuota sindical de junio les fue descontada del sueldo, pero no fue volcada a Fueci.
El conflicto viene desde los primeros días de junio, y el 11 de ese mes los trabajadores se presentaron en la oficina de trabajo. «Después pedimos audiencia en la Dirección Nacional del Trabajo, Dinatra, y ellos no se presentaron. A partir de ahí se tomaron estas medidas y volvimos a pedir audiencia».
Los trabajadores denunciaron la situación «en el BPS y la Comisión de Asuntos Laborales de la Junta Departamental».