Deportes | 17 Ago Hizo lo que pudo, pero le terminó ganando la realidad. Cada día que transcurre de los Juegos Olímpicos de Beijing, uno valora más y más aquella medalla plateada alcanzada en Sydney 2000, cuando fue tocado por la varita mágica de quién sabe quién, para romper con toda realidad.
Vaya uno a saber cuánto tiempo pasará para que Uruguay vuelva a estar en un podio olímpico. Y es por eso que lo vivido en aquella ocasión por el deporte celeste puede considerarse un milagro.
En la madrugada de la víspera volvió a quedar a la vista, tal como sucedió hace cuatro años en Atenas 2004, cuando se esperaba que la varita mágica volviera a sacudirse encima del ciclista sanducero Milton Wynants.
Pero otra vez los polvos mágicos eligieron posarse sobre otro color y no sobre ese celeste que cada vez está más desteñido, sin que logre siquiera llamar la atención.
Wynants, la esperanza uruguaya de repetir un milagro para subir al podio, solo pudo abrazarse al puesto 16º de la Prueba por Puntos, quedando por debajo de aquel noveno puesto logrado en los anteriores Juegos.
El sanducero fue superado claramente por el ritmo de carrera pero, pese a que estaba lejos de un 10º puesto, hizo el intento de dar vuelta las cosas cuando giraba la 46ª vuelta de las 106 que componían la prueba, y los ciclistas se preparaban para el quinto sprint.
Wynants se lanzó junto al argentino Juan Curuchet, también se prendió el veterano español Joan Llaneras, pero al sanducero no le darían las piernas.
Tras recuperarse del esfuerzo, en el décimo sprint volvió a buscar la escapada, pero poco podría hacer. Tan solo cinco puntos pudo sumar en su cuenta: 3 en la décima y dos en la duodécima, tras pasar segundo y tercero, respectivamente, en los embalajes.
Así se esfumó el sueño. Así se llamó a la realidad (como si hiciera falta) al deporte celeste, mientras Llaneras —con sus 41 años a cuestas— repetía la medalla de oro lograda en Sydney 2000. Sí, cuando Wynants fue medalla de plata, el mismo color que el español se colgó en Atenas 2004.
El podio, liderado por el español con 60 puntos, tuvo al alemán Roger Kluge en el segundo puesto con 58, y al inglés Chris Newton en el tercero con 56.
Objetivo cumplido
El Doble Par Ligero de los remeros Rodolfo Collazo y Javier García cumplió el objetivo trazado para estos Juegos, es decir ubicarse entre los 15 mejores.
En la final C, los celestes lograron la tercera ubicación (detrás de Japón y Hungría) para culminar 15º en la general entre 20 botes, escalando algunas posiciones con respecto a Atenas 2004, cuando fueron 18º.
Chau, chau, adiós
El laserista Alejandro Foglia observa desde lejos la posibilidad de meterse entre los 10 mejores.
En la quinta regata, disputada en Qingdao, el navegante uruguayo obtuvo el 37º puesto para caer al lugar 24º de la general.
Debut
Esta noche debutarán los dos últimos deportistas uruguayos en los Juegos. Heber Viera correrá la eliminatoria de los 200 metros llanos desde las 23.05, cinco minutos después de que Andrés Silva participe en los 400 metros.