Locales | 17 Ago Frente a las negativas repercusiones públicas surgidas en nuestro medio con motivo de la publicación realizada en el diario El Telégrafo el pasado domingo 27 de julio, respecto a una reu-nión mantenida por colonos con directores del Instituto Nacional de Colonización, respecto al tema de regularización de títulos, nos vemos en la obligación de realizar algunas puntualizaciones, sin ningún ánimo polémico, únicamente con la finalidad de aclarar la situación planteada.-
Frente a la temática originada por la aprobación de la ley 18.187 nuestra Filial ha participado en el estudio del tema, presentó un trabajo en el encuentro Técnico Regional realizado en Salto y tiene un delegado en la comisión creada por la Asociación de Escribanos del Uruguay para la consideración de la referida ley.-
Hemos manifestado y reiteramos que no nos oponemos sino al contrario apoyamos, la necesidad y/o utilidad de fortalecer el INC, y que no estamos defendiendo determinados intereses económicos, ni fuentes de trabajo mediante actitudes corporativistas, ni de defensa de situaciones de hecho indebidas, sino tratar de aportar elementos que corrijan y mejoren la aplicación de la ley referida.-
Consideramos positivo que se promueva a dicho Organismo comprando tierras, mediante expropiaciones o tomándola de otros Organismos Públicos que no le dan un destino productivo o que no implican solucionar problemas de radicación, así como entendemos que se deben apoyar estas medidas con otras de adjudicaciones de áreas productivas y dar un adecuado apoyo financiero y técnico a los colonos, para que la solución sea completa.-
En ese sentido y sin hacer una enumeración total que no tendría sentido por este medio, establecimos nuestra conformidad con la solución de regularización de la titulación. Solo que agregamos que entendemos mejor que esa regularización opere por la sola disposición legal, sin necesidad de realizar trámites administrativos complementarios por parte de los adquirentes de fracciones, que no agregan nada a la buena solución dada y pueden dar lugar a consecuencias no queridas por el INC o por los titulares.-
La discrepancia esencial que se ha dado en este tema es el de considerar incluidos en los bienes que necesitan autorización del INC para su venta y a favor de adquirentes que hayan sido aceptados como aspirantes de tierras por dicho organismo, a los bienes que fueron enajenados antes de la ley 11.029 que creó dicho Instituto de Colonización en el año 1948.-
Por lo tanto planteamos que se modifique la ley, eliminando el alcance a todas las colonias (parece comprender a toda colonización privada y anterior al año de creación del INC), y en forma especial a las fracciones que habían sido vendidas originalmente por el Sector Fomento Rural y Colonización del Banco Hipotecario del Uruguay.-
Las fundamentaciones legales y las discrepancias de interpretación, no es este el lugar de dilucidarlas, pero si nos parece demasiado importante como para no publicar, el hecho de que durante muchos años el referido instituto nos informó verbalmente e incluso en las oportunidades en que se le solicitó expidió constancias, estableciendo que esas fracciones no estaban comprendidas en la regularización de dicho organismo; y que quienes actuamos con ese convencimiento ahora debamos decirle a los adquirentes que en lugar de comprar bienes libres tienen esa enorme dificultad en cuanto a su valor y posibilidad de negociación.-
Pasando a las declaraciones del Ing. Agrónomo Yerú Pardiñas, nuestra preocupación por sus declaraciones, se debe a los siguiente elementos: 1.- Expresa el referido integrante del Directorio del INC que es mucho más fácil estudiar 35 años (creemos que quiso decir 30 o lo entendieron mal), que si se pagan por nuestros servicios y tenemos que estudiar 80 años para atrás que estudiemos porque la Universidad no nos formó para decir eso. Lamentamos contradecirlo en cuanto a que nunca dijo la Asociación de Escribanos del Uruguay que no quería estudiar títulos o que estableció un límite en forma arbitraria, solo que creemos que la Universidad sí nos enseño el INSTITUTO DE LA PRESCRIPCIÓN ADQUISITIVA TREINTENAL, y así hay alguna sentencia que dio la razón a este planteo no obstante la oposición del INC.Claro que hay otras bibliotecas y puede haber otras sentencias y la jurisprudencia puede cambiar (como sucedió con el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas), pero nosotros nos creemos con derecho a defender lo que jurídicamente entendemos correcto.
2.- Además aceptamos la discrepancia, la hemos discutido a nivel interinstitucional cuando una delegación de nuestra Asociación de Escribanos fue recibida por el Directorio del INC con asesoramiento de su sector legal, pero es inaceptable que el Director Yerú Pardiñas Ingeniero Agrónomo, nos destrate por medio de un diario con el alcance de El Telégrafo, diciendo que «estudiemos», como si no lo hiciéramos en la forma debida.
3.- Y si nos dolió y molestó su planteo, más aún fue debido a que dicho profesional es el representante de la Universidad de la República en el Directorio del INC, y por lo tanto entendemos que debería defender la formación y ética que nos enseñó nuestra máxima casa de estudios, en cuanto al conocimiento técnico respectivo y al respeto por los demás universitarios, así como por cualquier persona que trabaja dignamente y con responsabilidad.-
Tan equivocados en nuestros planteos no debemos estar cuando el diputado del Frente Amplio por el Departamento de Paysandú, el Sr. Juan Domínguez, expresó según resulta de un artículo publicado por el mismo diario El Telégrafo el día martes 22 de julio titulado «Cambiarán ley de Colonización: .......los de antes de 1948, es justo que sean tratados en forma diferente, ..tienen razón los de antes de 1948...».
Terminamos esta nota diciendo que no ingresaremos en ningún tipo de polémica y muchísimo menos por medios periodísticos. Seguiremos estando a la orden para continuar en la profundización del estudio de esta ley, y en encontrar la mejor solución para todas las partes interesadas, pues el futuro del INC y su eventual defensa no solo de los colonos, de los titulares de la tierra, sino de la forma de explotación necesaria o conveniente para nuestro País, es un objetivo que compartimos totalmente. Esc. Hugo Giupponi Presidente; Esc. Andrea de León, Secretaria.