Nacionales | 21 Ago Uruguay vivió ayer el primer paro general de 24 horas convocado por la central sindical Pit Cnt contra el gobierno de Tabaré Vázquez, con una plataforma de reclamos políticos y salariales. Mientras la dirigencia sindical señalaba un alto acatamiento en todo el país, el ministro de Trabajo, Eduardo Bonomi, dijo que la medida no ayudará a acelerar la discusión en los Consejos de Salarios.
El Pit Cnt llegó dividido a la instancia de protesta, reclamando un salario mínimo de 8.500 pesos, la incorporación de «cláusulas gatillo» en las negociaciones salariales, cogobierno en la educación y mayor presupuesto, control de precios y la reducción de la jornada laboral.
También exigió una «mejor redistribución de la riqueza», «desarrollo productivo y social», «defensa de las empresas públicas» y la anulación de la Ley de Caducidad, según su plataforma.
En las primeras horas de la mañana de la víspera se registró un ataque a pedradas contra dos unidades del transporte colectivo de la empresa Cutcsa.
Alvaro Santiago, directivo de Cutcsa, dijo a «El Espectador» que «tres personas (...) atacaron a pedradas a los ómnibus y rompieron parabrisas y vidrios laterales».
Los autores fueron identificados por la Policía como dos taxistas, quienes ahora se encuentran a disposición de la Justicia, agregó la emisora.
El secretario general del radicalizado sindicato del taxi, Suatt, Sergio Pereyra, dijo al mismo medio que «descartamos que haya sido una acción de nuestro sindicato». Señaló que «estamos intentando averiguar bien qué fue lo que pasó», «accionar en consecuencia a partir de eso», y agregó que en ese momento solo estaba circulando el 30% de la flota de taxis.
El acatamiento al paro fue bastante relativo, en la medida en que el comercio funcionó normalmente, así como buena parte de la actividad privada, mientras el transporte experimentó una leve disminución.
En el sector salud, tanto público como privado, se atendieron urgencias y emergencias, mientras que en la educación varios institutos privados abrieron sus puertas.
Cutcsa informó que funcionaba con un 85 por ciento de su flota, servicio que suspendería desde las ocho de la noche hasta la medianoche, cuando el servicio se reanudó normalmente.
El Pit Cnt aseguraba que existía «un buen acatamiento» del paro. El dirigente sindical Juan Castillo señaló que «la inmensa mayoría de los trabajadores del país han acatado el llamado de su sindicato y de su central para la paralización de actividades».
El paro se desarrolló tras una división en la Mesa Representativa del Pit Cnt, donde sectores moderados y radicales tenían propuestas diferentes, prevaleciendo a la postre la postura de estos últimos.
Los moderados impulsaban la realización de un paro parcial con movilización, mientras los radicales impulsaban el paro general de 24 horas. El radical Joselo López, dirigente del sindicato de empleados públicos Cofe, afirmó que «entendíamos que la coyuntura política actual efectivamente ameritaba una medida de esta característica».
Por su parte, Castillo indicó que «no estamos tan mal en el país como para hacer un paro general de 24 horas. Yo creo que han habido avances importantísimos y esto nos está costando explicarles a los trabajadores. Entonces, ¿por qué un paro de 24 horas?», inquirió.
Ya sobre las 20, el Secretariado Ejecutivo efectuó una breve reunión en donde estableció que el acatamiento fue altamente satisfactorio.
«No abrió una sola escuela del país, así que el 100% de la escuela pública y de los liceos públicos del Uruguay adhirieron a la medida. La actividad portuaria fue nula, cubierta solamente con guardias gremiales y de emergencia. La industria fabril paralizó totalmente las actividades, los trabajadores del transporte adhirieron en un 100% a la medida y el transporte público que anduvo fue porque accionistas o patrones estuvieron al frente desde la empresa», afirmó Castillo tras la reunión.
Bonomi relativizó medida
Por su parte, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Eduardo Bonomi, opinó que el paro de ayer no incidirá en el ritmo de los Consejos de Salarios.
«Uno de los motivos (del paro) es la lentitud de la marcha de los Consejos de Salarios. Pero la lentitud no se debe a que no estén funcionando asiduamente. Están funcionando asiduamente. Lo que hay son problemas de acuerdos en la negociación», afirmó.
Hacienda votó cambios
a Reforma Tributaria
La Cámara de Diputados votó ayer en la Comisión de Hacienda las modificaciones a la Reforma Tributaria dispuestas por el gobierno, referidas a tributación por núcleo familiar y a la duplicación de deducciones en gastos de salud para personas discapacitadas.
El diputado frenteamplista Eduardo Brenta dijo ayer a «El Espectador» que la votación no fue unánime y que los cambios supondrán la renuncia a 100 millones de dólares anuales.
«No hubo unanimidad. Esto fue votado básicamente por la bancada del Frente Amplio. Algunos artículos fueron acompañados por la oposición, fundamentalmente los que incorporan lo que tiene que ver con el núcleo familiar que estará vigente a partir del 1º de enero del año que viene y también la duplicación de las deducciones en gasto de salud, donde ahora solo con la declaración del BPS (...) los discapacitados tienen el doble de la deducción por gasto de salud y gastos en general de los hijos y el resto de los menores de 18 años», explicó Brenta.
Mientras tanto, desde filas nacionalistas, el diputado Germán Cardoso aclaró que su partido votó en general el proyecto porque pretende «la derogación de los impuestos a las rentas del trabajo».
«El Partido Nacional ha dicho que Uruguay tiene que terminar con los sistemas de cobrar impuestos a los salarios», dijo Cardoso.
El Partido Colorado votó en contra el proyecto en general y a favor algunos artículos como el que incrementa el mínimo no imponible del IRPF.
El diputado José Amorín Batlle dijo que este fue un buen principio para llegar a eliminar totalmente un impuesto «absolutamente negativo» que «grava al trabajo. El Uruguay sale adelante con la gente que trabaja y por lo tanto no hay que castigar al trabajo, sino que hay que incentivarlo», afirmó.
Contenedores de
basura desbordados
Mientras la Intendencia de Montevideo asegura que está dando buenos resultados el plan de contingencia instrumentado para amortiguar las consecuencias de la interrupción del servicio de recolección de basura, Adeom entiende que el estado de deterioro de los servicios responde a las políticas aplicadas durante los últimos 17 años. Mientras tanto, los medios televisivos divulgaban ayer imágenes de los contenedores distribuidos en diferentes barrios de la capital, la mayoría de ellos desbordados.
El dirigente de Adeom, Fernando Baña, dijo ayer a «El Espectador» que la posibilidad de que el gobierno declare la esencialidad del servicio «es una verdadera farsa».
«Si no hacemos más rápido la recolección es porque el estado de la flota y la situación de la División Limpieza y fundamentalmente en lo que hace a la recolección de residuos, está en un estado de deterioro jamás visto, culpa de las políticas aplicadas durante estos 17 años», dijo Baña. Por su parte, el director de Desarrollo Ambiental de la comuna capitalina, Néstor Campal, indicó que si bien muchos contenedores están desbordados, la situación general está controlada, en tanto destacó la colaboración de muchos vecinos.
«No se han producido situaciones graves o fuera de control. Si el jueves termina el paro, se podrá salir de la situación sin un impacto importante y empezar a dejar la ciudad en condiciones a partir del viernes», añadió Campal.