Locales | 06 Sep Paysandú no escapa a la realidad de un un estudio realizado por la Cámara Nacional de Comercio, en el que se indica que la mayoría de los empleos que se han creado en los últimos años en el país son de mala calidad, de acuerdo a lo manifestado por empresarios locales a EL TELEGRAFO. Este escenario se traduce en un alto grado de informalismo y subempleo, lo que indica que se mantienen serias dificultades laborales —sobre todo en el caso de personas de relativa capacitación— y de sustentabilidad de la fuente laboral.
El informe de la Cámara Nacional de Comercio da cuenta que existe una alta tasa de informalismo y de subempleo como prueba de la «permanencia de las dificultades laborales a pesar del crecimiento de la tasa del empleo». Ello ocurre porque «buena parte de los puestos de trabajo creados en los últimos años en el país ha sido de mala calidad». La evaluación de la entidad empresarial se basa parcialmente en los datos de subempleo y no registro a la seguridad social entre 2004 y el primer semestre de este año, con aportes de información de la Encuesta Continua de Hogares Ampliada y de la Oficina Nacional del Servicio Civil. Estos datos señalan que el informalismo en el sector privado era de prácticamente el 41 por ciento el año pasado, en tanto en el 2004 esa tasa había llegado al 49 por ciento. Pero indica la cámara que «si bien se nota cierta reducción de la tasa de informalismo de las personas ocupadas, aún es muy alta sumado al gran aumento que se produjo en el desempleo».
todavía un misterio
Mientras tanto, consultoras y técnicos del gobierno no han logrado desentrañar las causas para el aumento de los índices de subempleo, si se tiene en cuenta que en 2008 los índices prácticamente se duplicaron respecto al año pasado y en julio último se llegó al nivel más alto de los últimos tres años. El Instituto Nacional de Estadística define al subempleado como «el ocupado que trabajando menos de cuatro horas semanales manifiesta deseo de trabajar más horas y está disponible para hacerlo». En las cifras oficiales se ubica por un lado el subempleo, el trabajador no registrado, que no aporta a la seguridad social, y los que tienen empleo sin restricciones. A partir del primer semestre se registró un crecimiento importante en el número de subempleados, al punto que en julio había 254.445 subempleados, lo que significa el 17 por ciento del total de ocupados. En el INE hasta ahora no se ha llegado a una explicación del por qué de esta alta evolución del subempleo.