Paysandú, Jueves 11 de Septiembre de 2008
Locales | 07 Sep (Por Enrique Julio Sánchez, desde Estados Unidos). «Peleen conmigo», dijo el senador John McCain, al aceptar formalmente la candidatura a la Presidencia de Estados Unidos, en la parte culminante de la Convención Nacional Republicana. El ex prisionero de guerra (en Vietnam, cuando el avión de combate que piloteaba cayó tras líneas enemigas en 1967) prometió que «el cambio esta llegando».
Ciertamente, un cambio será necesario, venga de un gobierno liderado por un republicano o por un demócrata. La economía necesita claramente un cambio de timón, mientras las últimas noticias, lejos de ser esperanzadoras, traen nuevas preocupaciones. Por ejemplo, la tasa nacional de desempleo trepó por encima del 6% en agosto, el nivel más alto en los últimos cinco años, dejando en claro que los problemas económicos están lejos de desaparecer.
La pérdida de 84.000 puestos de trabajo solamente el mes pasado, elevó de 5,7% a 6,1% la tasa de desempleo, lo que equivale a 9,4 millones de desempleados. El año pasado, también en agosto, la cantidad de personas sin empleo, era de 7,1 millones.
De todas formas, los combustibles continúan su descenso —el precio actual en el norte de New Jersey es de 3,31 dólares el galón—, lo mismo que los niveles de aceptación de la Presidencia de George Bush. Precisamente, lo que Obama intenta es que la elección del venidero 4 de noviembre se convierta en un plebiscito en torno a la Presidencia de Bush, lo que de seguro pondría al demócrata en la Casa Blanca.
Pero McCain ha apelado a la sinceridad, en un desesperado intento por alejarse de Bush, aunque el partido los una. En estos días ha colocado un anuncio en televisión donde asegura que «estamos peor que hace cuatro años».
La estrategia parece haber dado resultado, pues ha acortado distancias con Obama. Según una encuesta Gallup realizada entre el 21 y 23 de agosto, Obama lideraba la intención de voto con el 55%, mientras que McCain tenía solamente el 39%. Pero otra encuesta de Gallup, de la semana que acaba de culminar, muestra que Obama lidera por solamente 4 puntos.
Los republicanos continúan exponiendo la escasa experiencia política de Obama, y los demócratas se hacen un festín con la elegida a la vicepresidencia republicana Sarah Palin, cuya hija de 17 años está embarazada y ella misma ha sido acusada de adulterio, cuestiones que en esta nación son de capital importancia.
Obama, de paso, estuvo en New Jersey en estos días, no para buscar votos sino para recaudar dinero para su campaña, como lo había hecho hace un mes su rival McCain. Obama estuvo en la mansión de Jon Bon Jovi, en una cena a la que asistieron unas 100 personas, que pagaron cada una 2.300 dólares.
Y aunque no deseada, la que estaba llegando a costas de New Jersey al momento de escribir esta columna, era la tormenta tropical Hanna, después de golpear North Carolina y en su camino a New England. Varios alertas habían sido irradiados en la zona, donde se esperaban lluvias de entre 75 y 175 milímetros. Las primeras lluvias comenzaron en la noche del viernes en el sur del estado y se anunciaba que continuarían hacia el norte, acompañadas de vientos de hasta 90 Km/h.
Tiempos tormentosos, sin duda.
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