Paysandú, Domingo 14 de Septiembre de 2008
Locales | 11 Sep La nueva legislación vigente establece que toda persona que fallece por causas violentas (accidente, homicidio, suicidio, etc) y en circunstancias que ameriten un peritaje de la Justicia, está en condiciones de ser donante de órganos, aún cuando ella o sus familiares no hayan expresado su voluntad de hacerlo. Por tal razón, el INDT tiene previsto un protocolo que le permite entrevistarse rápidamente con los familiares y obtener una ágil autorización. Además, la nueva normativa obliga a los centros de Salud a comunicar al INDT todos los casos en los que un paciente en Terapia Intensiva presenta muerte cerebral.
Según datos aportados por el doctor Raúl Mizraji, Paysandú (tanto desde el ámbito público como privado) es uno de los departamentos del país que menos notificaba al respecto.
No obstante, según la directora del Hospital, Salomé Wolman, hace aproximadamente 15 días «se dio una situación en la cual una persona muy joven tuvo una muerte cerebral como consecuencia de una herida de arma blanca» y logró concretarse la donación de sus órganos.
Las autoridades del Hospital -afirmó- se comunicaron con el INDT y la institución envió un equipo constituido por cirujanos y una psicóloga (para entrevistarse con los familiares), se efectuó la ablación (extracción de órganos) y dos pacientes que estaban en lista de espera recibieron sus riñones.
«El diagnóstico de muerte cerebral debe ser muy preciso. Una vez que una persona presenta muerte cerebral en una Unidad de Cuidados Intensivos, se lo sostiene (artificialmente), se genera la ablación de órganos y después se entrega el cuerpo a los familiares», explicó Wolman. La profesional explicó que un paciente con muerte cerebral está «legalmente y fisiológicamente muerto», dado que tiene «una muerte encefálica» y «su núcleo respiratorio no funciona más». Entonces, a través del equipo de cuidados intensivos, se evita el paro cardíaco hasta tanto se efectúa la extracción de órganos.
«Se lo mantiene (al paciente) con asistencia externa. Esa persona desconectada, sin sostén técnico-tecnológico de la Unidad de CTI, no vive, no respira», dijo.
Reveló además que esta fue la primera vez que se plantea una situación de este tipo desde que se desempeña como directora del Hospital, pero que -según le informó el personal- esta es la tercera vez que el equipo del INDT se traslada al Centro de Salud por un caso de esta naturaleza.
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