Paysandú, Viernes 26 de Septiembre de 2008
Nacionales | 22 Sep Armas afuera
Vehemente como de costumbre y visiblemente dispuesta a llegar a todos los partidos políticos, la ministra del Interior, Daisy Tourné, exhortó a trabajar mancomunadamente en pos de una nueve Ley de Armas que sustituya a una legislación que considera «vieja» y remendada a través de «sucesivos parches». Uno de los aspectos más relevantes de la iniciativa de Tourné refiere a la eliminación de las disposiciones que habilitan a los legisladores a portar armas. La propuesta no parece del todo descabellada, ya que peor que «mono con pistola» es precisamente un legislador falto de ideas y con un arma encima. Según «La República», la secretaria de Estado se manifestó partidaria de eliminar de «raíz» la normativa que habilita a los legisladores a portar armas, porque entiende que no pueden existir «ciudadanos categoría A». Respecto a las apreciaciones del coleccionista Julio César Lestido, quien opinó que no debería haber «hijos y entenados», Tourné aseveró: «Mi querido Julio Lestido, si será antigua la normativa de que haya determinados ciudadanos que tengan derecho a portar armas y haya ‘hijos y entenados’, que el Reglamento de la Asamblea General dice, a título expreso, que deben dejar el arma afuera de la sala. Si habrá cosas que reformar».
Arrumacos electorales
Las encuestas no mienten. El Partido Colorado sigue estancado en un 9 por ciento de intención de voto y la posibilidad de jugar un papel preponderante en las próximas elecciones parece cada vez más lejano. Si bien los dirigentes más jóvenes prefieren no hablar de un eventual apoyo al Partido Nacional en el contexto de un también hipotético balotaje, la vieja guardia partidaria no ve con malos ojos la posibilidad de apoyar a los blancos y luego beneficiarse con cargos relevantes en el gobierno.
«El País» recordó que el pasado miércoles 17 el presidente del Directorio del Partido Nacional, Jorge Larrañaga, se acercó hasta el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Colorado, para plantear un posible acuerdo que permita unir fuerzas para derrotar al Frente Amplio. Uno de los candidatos «renovadores» que serían afines a la idea es el precandidato de la Lista 15, José Amorín Batlle, quien se ha manifestado dispuesto a apoyar a aquel candidato con quien tenga «más afinidad» en lo «programático».
«Un escenario (para arribar a un acuerdo) puede ser una coalición desde donde podamos trabajar, como por ejemplo desde el gobierno», dijo. Otro precandidato de la línea innovadora, el intendente de Rivera, Tabaré Viera, se expresó en desacuerdo con Amorín y señaló que no es momento de hablar de acuerdos, por tanto Larrañaga se adelantó a los tiempos.
«Primero hay que elegir el candidato y definir nuestro programa. Queremos ir a la primera vuelta con vocación de estar en la definición y recién después conversaremos sobre aspectos programáticos», dijo y subrayó que los colorados votan a los colorados.
Por su parte, quien recoge más intención de voto dentro del partido, Pedro Bordaberry, prefirió quitarle trascendencia al acercamiento de Larrañaga. «Es un tema que hay que dejar para luego de las elecciones del año que viene. Recién después de la primera vuelta se sabrá si se necesitan coaliciones o no», precisó.
Ni Astori, ni Mujica
No hay mejor defensa que un buen ataque. Las encuestas señalan a Danilo Astori y a José Mujica como los preferidos dentro del electorado frenteamplista y Luis Alberto Lacalle, que de esto sabe y mucho, ya comenzó a afinar la puntería y a socavar lenta, pero eficazmente, a sus posibles rivales. En declaraciones efectuadas en un programa televisivo y recogidas luego por «El País», dijo que el ex titular de Ganadería no es un buen candidato porque «no está al nivel del país», en tanto recordó que Astori arrastra «la lápida» del IRPF. El ex mandatario también fue interrogado respecto a si Larrañaga es o no un buen candidato, pero declinó entrar en polémica. «No voy a decir más que elogios de un gran compañero al que le deseo suerte, pero un poco más a mí», afirmó.
Al referirse al presidente Tabaré Vázquez, dijo que se trata de un «amigo más allá de las discrepancias absolutas» en lo político. Dijo que fue el único mandatario que se reconoció como un «gran presidente», lo que indica que «no es acomplejado» y «se siente seguro», pero resaltó diferencias con su forma de ejercer el poder.
«Yo soy piñón fijo, de no parar nunca el pedal», dijo Lacalle y señaló a Vázquez como alguien que «se lo toma con un poco más de soda» y realiza «otras actividades» además de ejercer la presidencia.
Otra vez Maldonado
El intendente de Maldonado, Oscar de los Santos, no liga una. Cuando el escándalo generado por la relación de la comuna con la empresa Satenil venía disipándose, surgió una nueva polémica, en este caso relacionada a la concesión de servicios de recolección de residuos. Tres de las empresas que pugnaban por ganar la licitación anunciaron que iniciarán acciones legales contra la Intendencia fernandina por entender que hubo desprolijidades en el proceso.
El asesor legal de una de las empresas supuestamente damnificadas, William Rodríguez, dijo que el proceso fue «irregular» porque «los informes técnicos son parciales, tendenciosos y erróneos».
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