Rurales | 12 Oct La globalización en especial para un país pequeño como Uruguay, tiene ventajas notorias en el plano comercial y en el flujo de capitales. Pero en momentos de gran incertidumbre y caídas estrepitosas en los mercados financieros y bursátiles de los países desarrollados, los coletazos se hacen sentir con crudeza. El mercado ganadero no puede ser ajeno a ello y en las últimas semanas se ha visto sacudido por fuertes bajas en la demanda internacional por carne vacuna, que redunda obviamente en una caída drástica en la demanda por ganado gordo de la industria frigorífica.
Al promediar la semana pasada algunas plantas habían reanudado las compras a precios de U$S 2,60 y U$S 2,30 el kilo de carcasa de novillos y vacas, respectivamente. Más allá de la fuerte baja del precio, no dejaba de ser una buena noticia el hecho de que se pudiese colocar la producción. Pero esto duró pocos días. El inicio de esta semana fue con nuevos derrumbes en los principales mercados bursátiles y el comercio internacional se redujo a un mínimo. La demanda por ganado gordo también y desde el pasado jueves, nuevamente no hay precio ni fecha para colocar ganado en la industria, establece un informe de la Consultora Blasina y Tardáguila.
Indefectiblemente esto golpea los valores de la reposición, como lo demuestra el remate por pantalla de Plaza Rural de esta semana. Los precios son muy inferiores a los de subastas anteriores y la cantidad de ganado que no se vendió creció significativamente; algunos ni siquiera salieron a la venta dado que los propietarios observando los valores obtenidos, decidieron no vender.
La extrema volatilidad de los precios tanto de los productos como de las monedas lleva a los operadores a esperar a que las cosas comiencen a calmarse para volver al mercado. Hasta que ello no suceda parece poco probable que el mercado retome fluidez.
seguro de paro
En Tacuarembó hay más de doscientos trabajadores del frigorífico en seguro de paro. El jueves los obreros de la industria frigorífica nucleados en Aoefrit (Asociación de Obreros y Empleados del Frigorífico Tacua- rembó), reclamaron destrabar las negociaciones en los consejos de salarios.
Según integrantes del sindicato, en Tacuarembó hay más de doscientos trabajadores en el seguro de paro y la planta frigorífica se encuentra trabajando al 50% de su potencial debido al faltante de ganado a nivel nacional.
El jueves se había informado que el Frigorífico Florida envió a 225 de sus 330 trabajadores al seguro de desempleo.
Los frigoríficos empezaron a mandar al personal al seguro de paro ante la inexistencia de negocios nuevos con el exterior por la crisis crediticia y la escasez de ganado preparado para faena por la falta de lluvias.
La empresa de Florida colocaba el 70% de sus embarques en Rusia, un mercado que demandaba todos los cortes de la res, excepto los traseros que tenían por destino la Unión Europea (en cumplimiento del cupo país de 6.300 toneladas).
Ante este escenario los frigoríficos convinieron efectuar cierres rotativos de sus plantas, dijeron a El País fuentes del sector industrial.
En las próximas semanas, dos o tres plantas frigoríficas incluida alguna de gran porte enviarían parte del personal al seguro de paro, como consecuencia de la situación que se vive a nivel mundial, confirmaron empresarios del sector.