CHAPICUY

Policiales | 15 Oct El cadáver de un hombre de 62 años, aparentemente asesinado a golpes, fue descubierto ayer en una pequeña chacra ubicada en las inmediaciones del kilómetro 448 de Ruta 3, cerca de la localidad de Chapicuy. Si bien al cierre de la presente edición las causas de su muerte no habían sido completamente establecidas y tampoco había detenidos, la Policía investiga el entorno del fallecido en busca del responsable de lo que evidentemente se trata de un horrible crimen.
Según información extraoficial obtenida por EL TELEGRAFO, el macabro hallazgo se produjo ayer en la tarde. Dos personas, tras recorrer los aproximadamente 20 metros que separan la vivienda de la entrada, llegaron hasta la pequeña chacra ubicada sobre el costado Oeste de Ruta de Ruta 3 en el kilómetro 448, con intenciones de comprar huevos, ya que su propietario, Domingo Benítez, de 62 años, los comercializaba habitualmente.
Tras golpear en varias oportunidades y no obtener respuesta, los visitantes optaron por ingresar a la propiedad pero se horrorizaron al decubrir el cuerpo sin vida de Benítez, tendido cerca de la entrada a la cocina.
Inmediatamente efectuaron la denuncia a la Seccional Séptima con asiento en Chapicuy y poco después se trasladaron hasta el lugar el subjefe de Policía, Joni Rodríguez, el director de Seguridad Onix Lima, la jueza penal de Segundo Turno, Blanca Rieiro, así como personal de Policía Técnica y de la Dirección de Investigaciones.
Terrible escena
Cuando la Policía ingresó a la vivienda, presenció una escena realmente estremecedora. A escasos metros de la entrada, tendido cerca de la cocina, yacía el cuerpo de Benítez, quien presentaba heridas en la cabeza, aparentemente inflingidas con un objeto contundente, en tanto las primeras pericias determinaron que habían transcurrido entre 48 y 72 horas desde su fallecimiento. Si bien todo indica que se trató de un homicidio, esto será determinado fehacientemente por el médico forense. Según trascendió, Benítez vivía solo y era visitado permanentemente por vecinos de la zona, quienes acudían a la vivienda en busca de huevos y otros productos de granja. Aunque hasta el cierre de esta edición no había detenidos, la Policía indagaba a familiares y allegados del fallecido, con el cometido de dar rápidamente con el o los responsables de este horrible crimen.