CONVENIO MIDES-IDP

Locales | 23 Oct Al menos 20 familias del barrio La Chapita, en la zona suroeste de la ciudad, serán realojadas en viviendas nuevas y con terrenos aptos para la actividad productiva que desarrollan, que es el reciclado de residuos domiciliarios.
Así se desprende del convenio firmado ayer por la Intendencia de Paysandú con el Ministerio de Desarrollo Social, por el cual se dispone de la financiación de una donación, llamado «préstamo no reintegrable», del Fondo para la Convergencia Estructural del Mercosur, Focem, destinado específicamente al realojo de familias que viven en asentamientos irregulares.
El Mides aporta el dinero necesario para la compra de materiales de construcción de las viviendas y técnicos para acompañar el desarrollo productivo, mientras que la Intendencia dispone de los terrenos para construir esas viviendas, arquitectos, sobrestantes y capataces para guiar la construcción de las viviendas, que se hacen por ayuda mutua.
«Con esta firma concretamos un proyecto que viene de tiempo, una vez realizada la solicitud del apoyo al Fondo del Mercosur», resumió el intendente Julio Pintos.
Mejorar el reciclaje
Dijo que ahora «vendrá la contratación de técnicos para hacer la tipología de viviendas y el trabajo social con los vecinos, que ya venía haciendo con una asistente social de la Intendencia, y eso será reforzado».
También se trabajará en «la mejora de las condiciones del reciclaje de residuos que se hace en este barrio».
Para la ministra Marina Arismendi, «no son fondos espectaculares, pero hacemos experiencia en hacer rendir esos dineros». Recordó que «se trata de realojos de vivienda pero también de emprendimientos productivos. Por un lado se trabaja con los clasificadores para que tengan una forma de trabajo más digna, y que les rinda más».
En este sentido, señaló en un concepto ya expresado en Paysandú, que «la basura da mucho dinero pero no a los que la reciclan, sino a los intermediarios. Y el que la recolecta vive en condiciones muy difíciles, y la calidad de vida no es solo un tema de ingresos, es de cómo se vive».
Paralelamente, dijo que con esto se busca «crear el circuito limpio, esto es que los vecinos nos acostumbremos a sacar los residuos ya separados en ‘orgánicos e inorgánicos’, la yerba o la cáscara de papa que sirve para la huerta, y los plásticos o papel que se puede vender a través de la ley de envases, que dispone de un fondo de los mismos empresarios que necesitan envases, el Ministerio de vivienda y el Mides, el programa Uruguay clasifica».
De manera que el programa lleva también, además de la vivienda, emprendimientos productivos que brinden «la posibilidad de que tengan un medio de vida permanente, sostenible y que mejore su calidad de vida».
INVERSIÓN DE 11.000 DÓLARES
Consultada por EL TELEGRAFO, la secretaria de Estado especificó que la inversión que se hace en el caso de Paysandú es de unos 220.000 dólares en materiales y herramientas de construcción, por lo que se estiman unos once mil dólares para la construcción de cada vivienda, que se levanta con asesoramiento técnico y mano de obra de los vecinos, pero aclaró que «tenemos que ser lo más veloces posibles» en terminar esos proyectos, y «vencer los tiempos del Estado, que siempre son muy lentos».
En cuanto al emprendimiento productivo, indicó que «se trata de generar esos circuitos limpios donde los vecinos actúen clasificando de origen, que colabora con la limpieza de los barrios. Y por otro lado, trabajar en el tema de la comercialización. Y para eso tenemos acuerdos con las empresas que utilizan los envases. Ese trabajo es acortar el negocio, y que el dinero que queda muchas veces en manos de intermediarios quede en manos de quien trabaja y de quien reutiliza ese envase», sean botellas, plástico o cartón.
La ministra dijo no obstante que la cifra final que se invierte depende de cada proyecto productivo, «y de la forma en que se puedan solucionar», no descartando que puedan organizarse cooperativas para esa producción.
SEIS MILLONES
Esa es la cantidad en moneda estadounidense que se invertirá en todo el país en planes similares al de La Chapita, «y tiene varios componentes, una integralidad», según detalló a EL TELEGRAFO la economista María Noel Sanguinetti, del Mides.
En Paysandú «se trabajará en el apoyo a los emprendimientos productivos que se presenten, por lo que la inversión depende de cuáles sean y se aprueben. Por otra parte están los clasificadores y cómo trabajan los grupos. Y luego las estrategias integrales para el desarrollo de la zona de frontera».
«Tenemos un componente del realojo de las 20 familias y el acompañamiento social de la construcción en ayuda mutua, y el tema de la salud, la contaminación y programas de capacitación. Eso se cubre todo con el Fondo Mercosur».

SAN FÉLIX: "ALGUNA
COSA PODEMOS HACER"
Consultada sobre la solución que se maneja para el caso de las ocho familias desalojadas de San Félix, lugar donde piensa realojarse a cuatro de las 20 familias de La Chapita, la ministra Marina Arismendi dijo que «estoy enterada, vi el diario que me mandó el coordinador». En cuanto a si hay alguna solución que pueda aportar el Mides, indicó que «estuvimos hablando con el intendente, pero hay que ver».
«Porque nosotros en realidad lo que hicimos fue presentarnos para los proyectos de Fondos del Mercosur, y ganamos. Pero el caso de los vecinos de San Félix es más para verlo de manera triple, entre el Ministerio de Vivienda, nosotros y la Intendencia. Alguna cosa podemos hacer, con materiales. Pero no somos constructores de viviendas, y la Intendencia tampoco. Pero juntos hemos hecho experiencias aquí, con el PIAI, y podríamos sumar lo de los tres para hacer algo, como hemos hecho con los 19 intendentes».