Locales | 28 Oct En el marco de la búsqueda de alternativas en la materia prima con vistas a la elaboración de aceite para su uso en biodiesel, crecen las adhesiones a las implantaciones de jatropha o jatrofa, un cultivo del que se obtiene un aceite no comestible y que por lo tanto no compite con las oleaginosas de las que también se obtienen aceite para el consumo humano.
Quasar Industrias Químicas, una de las empresas argentinas que ha planteado formalmente su interés de instalar en Paysandú una planta de biodiesel a efectos de su mezcla con gasoil y la exportación, manifestó asimismo su visión de que es posible transportar oleaginosas como la jatrofa desde Paraguay, en barcazas, para procesamiento en la planta de Paysandú y su admisión temporaria con vistas a la exportación, en caso de que se opte esta alternativa si resulta más abundante o conveniente que los oleaginosos tradicionales como el girasol, la soja o la colza.
Recientemente, las empresas Carlos Casado y Patagonia Bioenergía se asociaron para producir Jatropha en Paraguay. Las dos empresas argentinas crearán una nueva sociedad para sembrar inicialmente 500 hectáreas en ese país.
La nueva sociedad (NewCo) estará integrada en partes iguales por ambas compañías y producirá inicialmente 500 hectáreas de Jatropha en la localidad paraguaya de Mariscal Estigarribia, Boquerón. La propiedad en la cual se llevará a cabo la explotación corresponde a Parsipanny Corp. S.A., una sociedad uruguaya controlada en un 100% por Carlos Casado.
Las hectáreas se transferirían a la NewCo a un valor de U$S 250 por hectárea. Una vez cosechada la producción de la primera campaña realizada en la finca, las partes podrían incorporar a la NewCo 1.500 hectáreas adicionales, en tal caso a un valor de U$S 350 por hectárea.
Además, se informó que Patagonia Bioenergía y NewCo suscribirían un acuerdo por el cual la primera «tendría la obligación de comprar el 50% de la producción de NewCo a un precio de venta fijado en el memorándum» de entendimiento firmado entre Casado y Patagonia.