Rurales | 31 Oct Jorge María Zardo remató en el local de la Exposición Feria de Paysandú, con administración propia, despachando prácticamente la totalidad de la oferta, con mercado vendedor en terneros y el abasto, al igual que en ovejas para consumo.
La oferta se vio reducida debido a la posición adoptada por interesados en comercializar sus haciendas, que en las últimas jornadas decidieron no vender sus animales ante la incertidumbre de precios en el mercado. Aún así, los lotes consignados en esta oportunidad se vendieron, algunos de ellos con muy firme demanda y valores aceptables para el momento.
Buenos lotes de ovejas gordas llegaron a pagarse hasta U$S 39, y las más livianas para el campo en el entorno de U$S 24. Un lote de corderos se vendió en U$S 26; capones gordos en U$S 29 y los más livianos U$S 22. Algunos lotes se vendieron al corte, pero rápidamente fuera de pista se fueron colocando. Los vacunos se dispersaron con firmeza en las categorías de ganado gordo, con vacas que se vendieron en el entorno de U$S 1 el kilo en pista; vientres al bulto en U$S 400, en tanto que vientres empulpadas se pagaron U$S 330. La dificultad se verificó en lotes de vaquillonas –por las que se registró interés fuera de pista—, en tanto los terneros se dispersaron con fluidez, pagando hasta U$S 212 por ejemplares de sobre año, y entre U$S 172 y U$S 145 los más livianos. Jorge Zardo informó que la próxima subasta será el miércoles 12 de noviembre en el local «Edgar Bowack» de Quebracho, en tanto el jueves 27 rematará en la Rural sanducera.