Paysandú, Martes 04 de Noviembre de 2008
Deportes | 29 Oct Que Sergio Batista se quede con las ganas y la Sub 20 campeona olímpica, que no es poca cosa. Que Miguel Russo le siga apuntando al título del Apertura local con San Lorenzo, ya que le pisan los talones. Y que Carlos Bianchi extienda un poco más sus interminables vacaciones con esto de que la selección sí, la selección no.
Sí, el final de la era de Alfio Basile al frente de la selección argentina de fútbol terminó abruptamente gracias a un equipo que jugó a nada y que se complica en las eliminatorias, más allá de que no caben dudas de que estará en el Mundial 2010.
Pero todo final deriva en un comienzo. Y la segunda era de Basile al frente de Argentina le dará paso a una que antes de empezar recorrió el mundo entero: la era Maradona.
Después de tanto dar lata de lo que debe y no debe hacerse, Diego Maradona, para muchos el mejor jugadores de todos los tiempos, tendrá su esperada chance de dirigir a la selección argentina de fútbol.
Ayer, luego de una reunión con el capo máximo del fútbol argentino, Julio Grondona, la noticia de que Maradona sería el nuevo técnico de la selección corrió como reguero de pólvora. Finalmente el Diez tendrá su chance al frente del combinado albiceleste al que, es verdad, conoce como nadie al ser un verdadero símbolo de los colores de su camiseta.
Hace días Maradona, sabiendo que su nombre estaba en danza, comenzó a tejer su telaraña. Nuevamente se autopostuló, pero esta vez tomó el teléfono y comenzó a armar virtualmente su cuerpo técnico. Así, el primero en recibir el llamado fue Pedro Troglio, DT de Cerro Porteño de Paraguay, al que le habló de un proyecto que incluiría a la inolvidable generación que ganó el Mundial 1986, en el que brilló Maradona. El propio Batista, Troglio y el «Tata» Brown serían sus ayudantes de campo, al tiempo que uno de los preparadores físicos será Fernando Signorini.
Pero el proyecto incluiría un nombre al que muchos pedían, sin lugar a dudas por su pasado ganador: Carlos Salvador Bilardo. El «Narigón», técnico campeón en 1986 y vice en Italia ’90, será algo así como un manager general, aunque el propio Maradona se encargó de dejar sentado que «lo que quedó en claro es que al equipo lo pongo yo y lo paro yo».
Se fue Basile y comienza la para muchos esperada era del Diez. S.T.B.
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