Nacionales | 12 Nov Uruguay se encuentra bien parado ante la crisis financiera global, con altos niveles de reservas internacionales y un sistema bancario con buena liquidez, pero debe atender las presiones inflacionarias, estimó ayer el FMI. «Los altos niveles de reservas internacionales y de liquidez de la banca comercial brindan una protección importante frente al debilitamiento de la situación externa» a lo que se suma una reducción de «las necesidades de financiamiento público a corto plazo» que, entre otros factores, ayudan a contener el impacto de la crisis. Sin embargo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió en su reporte conocido como Artículo IV --en el que revisa las finanzas de los países-- que «la economía de Uruguay sigue siendo vulnerable. En particular, el deterioro de la situación financiera y económica mundial plantea riesgos a la baja para una economía pequeña, abierta y dolarizada como la de Uruguay. Uno de los principales retos macroeconómicos será contener la inflación ante los aumentos de precios de los alimentos y los combustibles y las presiones de la demanda interna y los salarios», estimó el FMI. Estos incrementos han contribuido a causar «presiones inflacionarias persistentes», indicó. «La inflación de doce meses hasta setiembre de 2008 inclusive fue del 7,5 por ciento, cifra que excede el límite superior de la banda fijada como objetivo por el Banco Central (7%)», añadió.
«Las autoridades tomaron medidas para contener los aumentos de precios, pero las presiones no han desaparecido», sostuvo el organismo financiero.
El FMI pidió a las autoridades de nuestro país que «mantengan una actitud de permanente vigilancia y prosigan con firmeza la agenda de reformas para preservar la estabilidad macroeconómica y sostener un crecimiento robusto de la economía».