Locales | 15 Nov «Estamos limpiando por etapas, a medida que baja el río, de todo lo que es resaca. Empezamos desde el mirador de playa Nueva hacia el sur», detalló a EL TELEGRAFO el jefe de Paseos públicos, Julio da Silva.
Dijo que «en el momento estamos trabajando dos personas directamente con la resaca, y hay cuatro más arriba. En la medida que el río vaya bajando, pondríamos más gente, porque desde Estefanell hasta La Curtiembre el volumen es mayor. Pero ahora ponemos solo la gente necesaria».
Cuando le toque el turno a la arena, Da Silva explicó que «cuando el río baje, vamos a hacer un tratamiento a la arena con el tractor, dando vuelta la arena para que con el aire y el sol se vaya limpiando, en una primera etapa. También se cortará el pasto, porque eso hace que sea más fácil eliminar el barro que va a quedar arriba».
Cuando se trabaje en la arena, «probablemente se trabaje con una pala mecánica para desparramar el volumen grande y el tractor con una rastra que haga la otra tarea».
Hoy sacan troncos
Sin embargo, hoy sábado irá una cuadrilla trabajando detalladamente «en lo que pueda haber quedado cerca de la orilla, y eliminándolo porque es muy peligroso, y a pesar que no está habilitado, ya hay gente que se está bañando». Se comenzará con «la zona B, que se han detectado cuatro o cinco troncos, y mañana de mañana (por hoy) irá una cuadrilla para trozarlos y evitar riesgos». Se mostró optimista en cuanto estas tareas se culminen antes del 8 de diciembre, «siempre y cuando nos deje ‘don río’», dijo coincidentemente con Roveta. En cuanto a las zonas verdes, indicó que «ya plantamos algunos Ingá y Sauces», pero anunció que se hará «en playa Nueva y donde se tiró arena por parte del buque Renemar de la Intendencia un tratamiento de mata yuyos, como el cumplido en la zona A, que veremos qué pasa ahora cuando baje la creciente».
Sobre si se va a volcar arena nuevamente en la playa, dijo que «tengo entendido que por el momento no, los volúmenes que se tiraron fueron bastante tanto en la zona A como en playa Nueva».
En base a su experiencia, dijo que lo que el río se lleva de arena de la playa «siempre ha sido muy poco, aunque ahora corría muy fuerte, pero eso era al medio del río. Tal vez un poco haya llevado, pero la arena se aprieta mucho con el agua, por lo que tiene que ser una corriente muy fuerte para llevarla».
Recordó que algo similar ocurrió en el inicio de la temporada 2003- 2004, que estuvo crecido hasta el 5 de enero «que se había echado arena, y la que se había echado en la zona A quedó en su casi totalidad».