Rurales | 15 Nov El sector ganadero enfrenta la mayor crisis de demanda por hacienda de dos formas diferentes debido a las condiciones hídricas. En el Norte, las lluvias han beneficiado la producción de forraje, por lo que las pasturas en general están en muy buenas condiciones. En el Sur, por el contrario, la sequía hace estragos en las pasturas, con zonas donde la situación es muy grave (litoral).
Desde la mitad Sur del país, por lo tanto, hay una presión vendedora importante, ya que los productores no pueden retener su ganado, que se enfrenta a una demanda particularmente menguada por el muy bajo interés por carne en el mercado internacional, establece un informe de Negocios Ganadera.
En sólo tres meses el precio del novillo gordo en Uruguay cayó más de 50%, para ubicarse a menos de U$S 1 el kilo en pie, por primera vez desde principios del año 2007.
En el Norte se puede hacer un mejor manejo de esta «crisis de demanda» e incluso hay productores que están aprovechando los bajos precios del ganado de reposición, en el entendido de que se trata de una situación coyuntural y que cuando el mundo comience a estabilizarse, los precios de la carne (y del ganado) retomarán la firmeza.
Se advierte una mejor condición en las ferias y remates del Norte del país. Incluso, operadores de Plaza Rural comentaron que en la subasta que se desarrolló entre miércoles y jueves, se observó una preferencia por ganado del Norte, con poco flete para compradores de esa misma zona.
Desde el Norte también llega otra válvula de escape como lo es la exportación de ganado en pie. Uruguay es mucho más dependiente de las condiciones del mercado internacional que Brasil, que tiene un mercado interno mucho más voluminoso, por lo que los precios en el país norteño bajaron mucho menos que en Uruguay.
Actualmente hay una diferencia de más de 20% entre el precio del ganado uruguayo y el gaúcho, lo que está haciendo resurgir la exportación de ganado en pie.
Desde la segunda quincena de octubre ya se hicieron algunas operaciones (las que eran casi nulas desde mitad de año) y se están haciendo varios negocios más.
Más allá de algunos problemas para el acceso al crédito de parte de los importadores (algo a lo que no escapa ningún negocio de comercio exterior en estos momentos de extrema incertidumbre) y de la intención de algunos importadores de cotizar en reales, será una salida importante más allá del volumen que logre, por la intención que comience a llegar a un piso en el precio del ganado gordo.
Esta semana los novillos especiales cotizan a U$S 1,80 el kilo de carcasa y con tendencia que sigue siendo a la baja.