Nacionales | 21 Nov Relación stand by
El dirigente colorado Guillermo Stirling negó nuevamente que hayan sido problemas en la integración de las listas los que motivaron su alejamiento del sector Vamos Uruguay.
Entrevistado por «La República», el ex ministro dijo: «Hace meses que no hablo con Pedro» Bordaberry. «Quiero dejar en claro que quedé extrañado por lo que se ha publicado sobre integración de listas, de apertura de listas que se me negó, etcétera, porque todo eso nunca existió. Es más, esa conversación no existió porque hoy no existen ese tipo de problemas en Vamos Uruguay; se está en otra cosa», afirmó. Aclaró que su incomunicación con Bordaberry y su alejamiento del sector colorado se debe a su intensa actividad laboral. Afirmó que su relación con Vamos Uruguay «queda stand by». Además aseguró que las cifras de las encuestas (7 u 8%) no influyeron para hacerlo repensar la actividad política. «No, yo nunca especulé; nunca fue mi modalidad especular. Si hubiese especulado en el 2004 no me hubiese presentado. Sin embargo, saliendo del peor momento en la historia del país, vinieron las elecciones y nos encontramos con un país enojado con el Partido Colorado y con el gobierno, donde miles de votantes colorados hicieron opción por el Partido Nacional y el Frente Amplio. Hoy creo que eso se va a revertir. Todos los que votaron esperanzados al Frente Amplio, creo que tienen una cuota de desilusión», dijo.
Superficiales y erróneas
Pasando a otras tiendas, el senador de Asamblea Uruguay Danilo Astori le pegó duro, en su audición semanal en radio «Oriental», al ex presidente y actual precandidato presidencial Luis Alberto Lacalle por hacer propuestas que «oscilan entre la superficialidad y el error». Informa el mismo matutino que Astori salió al cruce de las declaraciones realizadas por Lacalle acerca de lo que sería el «Plan Dignidad» que implementaría en caso de ser electo.
El ex ministro expresó su asombro por propuestas nacionalistas: «Lacalle comete un error garrafal al decir que continuaría con el Plan de Emergencia. El Plan de Emergencia ya no existe, entonces mal se lo puede llamar de otra manera o reorientar en su funcionamiento».
Asimismo, criticó la iniciativa hecha pública por Lacalle de cambiarle el nombre al Panes. «Esta es una propuesta que supone, por un lado, la superficialidad de creer que cambiándole el nombre a las cosas se hacen cosas nuevas», dijo.
Agregó que lo mismo hizo el otro precandidato blanco, Jorge Larrañaga, «cuando propuso cambiarle el nombre al Ministerio de Desarrollo Social y llamarlo Ministerio de la Familia».
También señaló que se evidencia la falta de propuestas de Lacalle a la hora de anunciar que se va a eliminar el actual sistema tributario sin proponer nada a cambio. «Nunca he escuchado, hasta ahora, qué harían en lugar del actual sistema tributario. Si la propuesta consistiría lisa y llanamente en volver al pasado, volver a instaurar los 15 impuestos que este gobierno eliminó, volver a subir el impuesto al valor agregado y volver, eliminando el impuesto a la renta personal, a aquel horroroso e injusto tributo que se llamó impuesto a los sueldos, una suerte de impuesto a la renta que sólo gravaba los salarios y las pasividades», dijo.
«Va a hacer política»
Asegurando haber estudiado la Constitución, la ministra Daisy Tourné --en su rol de ministra política-- explicó a la oposición por qué el movimiento reeleccionista existe y se proyecta en el ámbito político. Obviamente, lejos estuvieron las respuestas de satisfacer a los miembros de la oposición.
El presidente «va a hacer política como han hecho todos los presidentes», dijo Tourné ante la comisión de Constitución de Diputados, convocada por el diputado blanco Pablo Iturralde, según publica «El País». Uno de los reproches más fuertes de la oposición fue la objeción que antepone el artículo 77 de la Constitución, en cuanto sostiene que el presidente tiene prohibido formar parte de comisiones o clubes políticos, actuar en los organismos directivos de los partidos o intervenir en la propaganda política de carácter electoral. Tourné analizó que esa disposición «no prohíbe autorizar el uso del nombre ni ejecutar cualquier otro acto político». Para ella, esa norma es «lógica y coherente en un país democrático, donde el presidente es el político número uno». Por eso indicó que el presidente Tabaré Vázquez permitirá usar su nombre e imagen en la campaña electoral. «Eso no está inhabilitado», enfatizó.
¿Nadie puede parar la mano?
Tourné dijo que el procedimiento de recolección de firmas es constitucional y, como sostuvo Vázquez, no se le puede coartar el derecho a los ciudadanos a juntar firmas. Dada esa situación, expresó que «nadie» puede «parar la mano», como le exigieron al presidente dirigentes opositores como Jorge Larrañaga o Pablo Mieres.
El nacionalista Álvaro Lorenzo afirmó que la actitud de Vázquez es «parte de una intervención sutil» en la interna frenteamplista buscando «influir» en la nominación de quien eventualmente pueda ser su sucesor. Y eso, para él, explica «las ambigüedades» sobre la reelección.