Deportes | 28 Nov Una hora y media de trabajo físico realizó en la víspera el plantel de la selección mayor del fútbol sanducero, que en la tarde se trasladó a la Plaza de Deportes donde efectuó una serie de testificaciones de la mano del preparador físico, el profesor Ramiro Chumino.
A lo largo del movimiento los jugadores se sometieron a las indicaciones, en tanto posteriormente el técnico Sergio Esquivel decidió dejarlos en libertad después del gran esfuerzo realizado en medio de la insoportable temperatura.
«No vamos a ir al Parque Rivabén a hacer fútbol porque el esfuerzo fue grande, así que mañana continuaremos con las evaluaciones físicas y volveremos a hacer algunos minutos de fútbol informal», dijo el entrenador.
Esquivel contó con todo el plantel a disposición ya que se integró nuevamente García, en tanto se espera por la evolución de la lesión de Cáceres, quien espera por ser revisado por el médico.
Franco Puerari no se integró al núcleo como se esperaba, y todo hace indicar que podría ser una nueva baja de la selección, ante lo que no se descarta que pueda surgir algún nombre que sea convocado para reemplazarlo. «La verdad es que estamos contentos, porque los futbolistas se entregan en un 100 por ciento, y siempre le dan para adelante», agregó el entrenador.
Pero la tarea más complicada —más allá de que la sufra el jugador— va de la mano de Ramiro Chumino, el preparador físico de la selección que tiene la difícil misión de que en pocos días el plantel encuentre su mejor estado atlético.
«Estamos testificando en dos aspectos: el aeróbico y el anaeróbico láctico. En el anaeróbico estamos regular, mientras que de potencia estamos bien.
Pero me preocupa el hecho de que no tenemos el tiempo necesario para desarrollar lo aeróbico, por lo que tenemos que ver cómo planeamos la estrategia de entrenamiento, quizá con doble turno y en algunos casos con triple turno, y comenzar cuanto antes con la musculación, algo en lo que estamos en el debe», dijo.
«Pagamos el precio»
Pero está claro que pedirles dobles y triples turnos a los jugadores es complicado, no solo por el aspecto laboral sino por el dinero con el que se remunera el esfuerzo a la hora de dedicarse a la selección. «La mayoría de ellos trabaja, hay varios que lo hacen en la construcción, y pedirles doble turno es un asesinato. Y no hay dinero para suplementos y demás», acotó el preparador físico de la selección.
Pero Chumino se mostró conforme. «Los jugadores hacen un sacrificio bárbaro, quieren y ponen todo. Pero no se pueden acelerar los procesos y pagamos el precio de que estamos a 21 días del debut. Creo que en lo físico llegaremos en las mejores condiciones al tercer partido».