Locales | 07 Dic El encuentro con el ministro de Industria, Energía y Minería, Daniel Martínez, permitió que los centros comerciales de Paysandú, Salto y Río Negro plantearan al jerarca la posibilidad de que se instrumente en esta región una exoneración impositiva que permita que también se rebaje el valor del gasoil, a efectos de competir con el que se vende en la vecina orilla y a la vez permitir que las pequeñas empresas puedan acceder a este combustible a menor precio, subrayó a EL TELEGRAFO el presidente del Centro Comercial e Industrial de Paysandú, Andrés Mannise.
Precisó que si bien se ha logrado combatir el trasiego de naftas, esta situación se da también hace ya tiempo con el gasoil, por lo que se dan circunstancias similares a las que llevaron a que se adoptara la rebaja de impuestos para las naftas.
Recordó el dirigente empresarial que «la pequeña y mediana empresa está trabajando con un combustible caro, porque si bien se ha cambiado la matriz energética del país, las pequeñas empresas se siguen moviendo con el gasoil para sus vehículos, y tenemos un carburante diesel caro, lo que a la vez deriva en el consabido trasiego de este combustible desde la vecina orilla».
Destacó Mannise que el titular de Industria se llevó los elementos expuestos por los centros comerciales y convino en transmitir esta inquietud al seno del Poder Ejecutivo, sobre todo al Ministerio de Economía y Finanzas, que tiene injerencia en la parte impositiva, así como a la Ancap.
Señaló el empresario sanducero que si bien no se tienen cifras oficiales respecto a la incidencia positiva del aumento de venta de naftas en cuanto a recaudación tributaria, habida cuenta de que se iba a la vecina orilla gran volumen de dinero sin pagar impuestos, a lo que se agregaban las compras conexas por quienes hacían un «viaje redondo», se sabe sí que el Estado ha compensado con creces lo que dejó de percibir por la exoneración del Imesi.
Una situación similar se daría con el gasoil, acotó, teniendo en cuenta que sería oportuno dar un tratamiento similar a las pequeñas empresas para también contar con un gasoil subvencionado como las grandes, que pueden descontar impuestos del precio final de este combustible.