Nacionales | 03 Dic Unidad por la victoria
Se acercan las elecciones y en el Partido Nacional son concientes de que sin unidad no pueden lograr el triunfo. Informa «El País» que, con las manos en alto y en medio del estrado, los tres precandidatos blancos se fundieron la noche del lunes en un fuerte abrazo. ¡Qué más remedio! El acto de recuerdo de la victoria electoral de 1958 fue la oportunidad para enviar un nuevo mensaje de unidad, de cara a las internas de junio. Ni bien cerró su discurso el senador Jorge Larrañaga --el último de los tres en hablar en la sede nacionalista--, los demás precandidatos, Luis Alberto Lacalle y Carmelo Vidalín, fueron en busca del saludo y del apretón de manos. Durante los discursos, obviamente, todos aprovecharon para criticar al gobierno. El presidente del directorio nacionalista, Carlos Julio Pereira, dijo que los blancos enfrentan el «tremendo desafío» de cambiar el destino del país en la próxima elección. Criticó duramente al Frente Amplio, mencionando actitudes «totalitarias» de comunistas y tupamaros. Lacalle sostuvo que los blancos deben tener «la cabeza abierta» para ser «el camino y la puerta de ingreso de los orientales que quieren ser obreros de su futuro» y nunca votaron al Partido Nacional. Advirtió que los blancos «no pueden mirar solo hacia atrás» y dijo que deben aprender de los errores. «Desde el año 26 hasta el 58 llevamos al extremo las diferencias y separaciones. Hay que juramentarse el nunca más, no hay derecho a negarle al futuro un gobierno del Partido Nacional», dijo el ex presidente.
«Los elige la gente»
Larrañaga, por su parte, resaltó que hayan estado los tres candidatos juntos e ironizó que «otros no pueden hacerlo». «Acá los candidatos no se eligen entre cuatro paredes, los elige la gente», afirmó. «La disyuntiva es entre libertad y despotismo. Tenemos que luchar por la libertad», agregó. Criticó «que un gobierno le meta la mano en el bolsillo al que trabaja para darle al que no trabaja». A su turno Vidalín señaló que «los que están en el poder pusieron marcha atrás y revolvieron el dolor de los uruguayos. No pusieron primera, segunda, tercera, cuarta ni quinta velocidad».
Lamentaciones
El senador emepepista José Mujica, en un acto en Tacuarembó, se lamentó por una serie de objetivos que no pudo concretar el gobierno frenteamplista, especialmente los que tienen que ver con el sector agropecuario. Según el portal del periódico «El Avisador», Mujica llamó a reformar el Estado para derribar la «muralla de papel burocrático». «Tenemos que luchar por tener un Estado que le ‘vuele la bata’», dijo. «Cuando fui ministro de Ganadería y Agricultura soñaba que a Colonización se le entregaran por lo menos 300.000 hectáreas, batiendo el récord en los últimos treinta años, pero llegó a 40.000», se lamentó. «Yo tengo conciencia de los 600 ganaderos nómadas que tiene el Norte del país. Lo siento como una deuda y sé que fracasamos», dijo.
«Un partido tradicional»
Mujica consideró además al Frente Amplio como «un partido tradicional». «Nuestros ancestros vinieron en barcos en tercera clase, fueron fundadores de oficios, también de sueños libertarios de la organización proletaria, que fueron conformando nuestra cultura», dijo. «De allí vienen nuestras raíces. ¡También somos un partido tradicional!, en el hondo y sano sentido de haber construido, con trabajo proletario, el progreso material de este país», agregó.
Más denuncias
El senador nacionalista Julio Lara, reanimado porque sus fueros continúan intactos, retomó la batalla contra el vicepresidente Rodolfo Nin. Consigna «Últimas Noticias» que Lara presentó una denuncia penal en Delitos Económicos de la Jefatura de Montevideo contra tres asesores de Nin, por «malversación de fondos» en un viaje que hicieron en julio de este año a Zaragoza, España. En la argumentación de la denuncia, Lara apunta contra la maniobra del edecán, el chofer y un asesor (auxiliar de sala) que acompañaron a Nin en la misión oficial al exterior. El senador de Alianza Nacional confirmó que la supuesta irregularidad «asciende a 21.000 dólares». Una de las pruebas es que «Raúl Valinotti (el asesor) estuvo en dos hoteles la misma noche, según las boletas que presentó». Otra fue que el chofer «estuvo en España cuando todavía no había salido de Montevideo», explicó. Aseguró que la factura indica 23 de julio, mientras que la partida fue el 24 de julio. Señaló que éstas son «serias irregularidades», las cuales «no fueron consideradas tanto por Nin como por el secretario del Senado (Hugo Rodríguez) Filippini». Por lo tanto, a su juicio estos tienen «responsabilidad» en la causa porque «sabían y no actuaron», cosa que fue especificada en la denuncia que está en manos el juez de penal de 15º turno, Ricardo Míguez. Recordó que esta supuesta irregularidad fue advertida al vicepresidente por medio de un telegrama colacionado. «El cual me respondió diciendo que no había ‘constatado irregularidades’, lo que me parece un disparate», acotó.