Locales | 09 Dic En cuanto al estado general de la flota, José Cáceres dijo que «algunas son ambulancias viejas y con poco mantenimiento. Porque antes estaban a cargo de una comisión de apoyo y a veces los choferes eran honorarios, o casi. Entonces las manejaba mucha gente, con buena voluntad y disposición, pero sumado el estado de los caminos, que no estaban muy bien. Además, como manejaban poco dinero, no se les hacía el mantenimiento debido, sino que se arreglaba lo que se rompía».
En cuanto a los gastos que se hacen a las ambulancias, sobre el combustible dijo que «cuando las ambulancias se adjudicaron, no se les daba ni chofer ni combustible, que era proporcionado por los vecinos». Ahora, y «desde que nos encargamos del tema el año pasado, pusimos el Sisconve» (Sistema de control vehicular, que controla electrónicamente el combustible y el recorrido de un vehículo).
Aclaró que «todas las ambulancias lo tienen, salvo la de Merinos, que está muy lejos, y en Guichón la estación Ancap no tiene Sisconve. Es la única que se mantiene con vales».
Cáceres mostró la factura del taller que hizo el servicio a la ambulancia de Orgoroso, donde se invirtieron $ 7.800 «y es solo mantenimiento, un servicio para remozar un vehículo. Esto de todas maneras se paga bien, porque contratar una ambulancia privada es más caro».
También comentó el caso de la ambulancia de El Eucalipto, «que se le hizo un trabajo completo, todo el motor, frenos y se le cambió hasta el parabrisas». También mostró la factura con el detalle de reparaciones de la Nissan Trade 2.8, que sumó $ 100.256. «Y eso pasa con todas las ambulancias, porque además son vehículos viejos, el desgaste es mayor, el mantenimiento más costoso y a veces se le arregla algo y se rompe otra cosa, salvo que hagamos como con esta, que se hizo todo completo. Pero a veces no da el tiempo. En este caso, tuve que destinar una ambulancia de Paysandú para aquella zona porque estuvo parada tres semanas».
Lamentó no tener una ambulancia de más, «porque entonces sí se mandan a arreglar y se sigue igual con el servicio sin resentir otros».
GASOIL PAGO
POR ASSE CENTRAL
El tema del combustible ya no preocupa tanto a la administración del HEL, aunque «tienen un promedio de consumo de 10 kilómetros por litro. Por ejemplo la que está más lejos, El Eucalipto, hace unos tres viajes a la semana, son unos 200 kilómetros, unos 20 litros por cada viaje». Sin embargo, «eso se paga a nivel central, se carga el combustible y lo paga ASSE en Montevideo». Lo que se hacía antes era que se daban vales de combustible. «Pero para nosotros es mucho mejor, porque antes había que administrar la cantidad de litros en vales, y ahora es más a granel, excepto para las de la zona de Guichón».
En cuanto a los demás repuestos o cubiertas, dijo que «no tenemos problemas». Sin embargo, en ocasiones se complica el conseguir el repuesto, «tenemos dos Nissan Trade una vieja de Lorenzo Geyres que le falta la tapa de cilindros y hace tiempo se busca sin conseguir. Pasa lo mismo con la de Piedras Coloradas. Creo que el ministerio trajo una partida especial y no hay repuestos en el mercado. Y las Renault Traffic también tienen problemas para conseguirle los repuestos».
Nombró una empresa de repuestos montevideana (Cymaco) «que tienen importación y se mueven para conseguirlos, y tenemos crédito».
En este aspecto, recordó que «después del fraude que hubo en el hospital, un poco me tocó de hacer de encargado de compras, y era muy difícil conseguir crédito. Logramos el apoyo de Cymaco, el mecánico Mauricio de León también se puso a la orden. En aquel momento era difícil conseguir crédito, y además mucha gente quedó ‘colgada0, porque teóricamente se les había pagado; pasó de todo», recordó.