AFECTA A 17 FAMILIAS

Rurales | 17 Dic El cierre del vivero del Instituto Nacional de Colonización (INC) en la colonia Ros de Oger, afecta directamente a 17 familias. Portando una pancarta en el reciente taller efectuado en La Casilla, Flores, indicaron: “17 familias viviendo del terror”.
Diego Henderson, directivo de la Asociación de Colonos del Uruguay (ACU), puso la institución al servicio de los obreros del vivero y del INC, para llegar a una solución, desmintiendo de esta manera la aseveración de un director del INC y un diputado del Encuentro Progresista, de la conformidad de la ACU con el cierre. Para Álvaro Ferreira, director del INC, la forestación “no era una actividad a juicio de este directorio que atendiera a la función colonizadora”.
El maestro Marcelo Noriega precisó a EL TELEGRAFO que “olvidó recordar que hace tres meses frente al Plan Forestal del año 2006, junto al ingeniero agrónomo Yerú Pardiñas frente a los obreros del vivero, asumieron su responsabilidad en el fracaso del plan. Los obreros cumplieron con 400.000 plantas, que están a la espera de ser vendidas desde hace dos años por los servicios competentes del INC, supervisados por el directorio”.
La mesa de Ros de Oger presentó una dura proclama en contra de esta medida, solicitando a la ACU pedir explicación sobre los servicios forestales desde el inicio del presente ejercicio, costos y medidas que llevaron al desmantelamiento.
Citó Noriega que los obreros rurales, “el escalafón más bajo, fue privado por este directorio del 12% de recuperación salarial, aprobado para todos los funcionarios del organismo”. En villa Quebracho se está dando una movilización popular a efectos de defender el ingreso de estas familias.
Noriega señala que el INC “es el ente de mayor capital, en comparación con los otros, y aún sumándolos. Capital que se hizo con 60 años de esfuerzo de los colonos que sobrevivieron a las crisis y de otros expulsados por las mismas, es patrimonio de la nación y el legislador debe velar por el control de los actos del Ejecutivo, a través de sus representantes, los actuales directores”.
Recuerda a los sanduceros que el INC “es de todos nosotros, por lo que no defender el patrimonio es un acto de irresponsabilidad ciudadana. Cada pueblo tiene el gobierno que se merece”.