HISTORIA: 1917

Locales | 23 Dic

Continuando su relato del viaje en tren para cubrir periodísticamente el remate de la estancia “Los Viraroes”, cercanías de Young, el “Corresponsal Viajero” de EL TELEGRAFO cuenta: “Llegamos a Young de noche. Ante la perspectiva de un largo y molesto viaje, la mayoría se decide a echar el ancla en la Estación. Dos automóviles se encaminan con algunos pasajeros hacia ‘Rincón de Francia’ donde el señor Roberto Stirling posee una confortable morada. Nosotros en cambio optamos por seguir la marcha para evitar el madrugón del día siguiente. Entre los vehículos dispuestos por Marroni para conducir a la concurrencia, elegimos un coche con capota de lona tirado por cuatro poderosos pingos. Nos acomodamos en él envueltos en mantas, sobretodos y ponchos Vázquez Ferreiro, Villar, Amy y el que suscribe dispuestos a pasar de la mejor forma posible las dos horas que nos separan del fin del viaje. El camino está algo pesado pues las últimas lluvias han llegado, aunque en muy pequeña parte, hasta aquí. En cambio nos dicen que desde Montevideo hasta Merinos ha diluviado hasta el punto de impedir que muchos interesados puedan acudir al remate por haberse desbordado los arroyos en muchos pasos”
“Los caballos que tiran nuestro coche que, se ve, están muy bien mantenidos pero --y estos son detalles que no dejan de preocuparnos-- son nuevos y existe la agravante de que el cochero no conoce bien el camino. En un descenso, el vehículo empieza a adquirir una marcada velocidad que va aumentando paulatinamente. En cierto punto ésta se convierte en carrera desenfrenada y los esfuerzos del guía no bastan a sujetar la marcha de los fogosos animales que ya no obedecen al freno. Llega un momento en que prevemos un desenlace nada agradable y más de uno se arrepiente de no haberse quedado en la estación hasta el día siguiente”.
“Por fin y después de repetidos esfuerzos logramos detener la carrera y aprovechando la lección, continuamos el viaje a paso lento. Tardamos media hora más pero logramos llegar con los huesos sanos a la estancia”.