Locales | 21 Dic Estados de ánimo o sinvergüencismo puro
  Desde un principio se sabía que la mal sancionada ley de educación iba a traer consecuencias negativas para el sector, pero lo que no estaba en mente de quienes la redactaron y de quienes a sabiendas de que estaba mal votaron tanto en Diputados como en el Senado, iba a ser el resultado final tras aprobarse en la rama alta parlamentaria.
 Para ello es necesario poder saber en qué estamos hoy la gran mayoría de los uruguayos, o mejor dicho hacía dónde nos posicionamos cada uno.
La violencia instaurada en el deporte, en las calles, en el tránsito y ahora en el propio recinto donde se dictan las leyes que rigen nuestra convivencia democrática, van pautando los estados de ánimo de todos los uruguayos, y el mismo es aprovechado por el sinvergüencismo disfrazado de mártir docente - estudiantil. 
Lo de días pasados en el Senado de la República superó todas las manifestaciones impulsadas por la agrupación Plenaria Memoria y Justicia, que de memoria deja mucho que desear y de justicia mejor ni hablar.
Fueron los mismos revoltosos del día que Bush llegó a Uruguay, del día que los taxistas manifestaron en el Ministerio de Trabajo y ahora se mezclaron en las barras del Senado para atentar contra las instituciones.
“ ¡Alcahuete!, ¡lame botas!” y otros epítetos descalificantes emanaron de un grupo no mayor a las 10 personas.
Tras haber mirado una y otra vez las imágenes de la televisión, nos mostraban una vez y otra también primero con la pasividad que actuó la Policía para desalojar las barras y de cómo los alborotadores profesionales fueron aumentando los insultos y de manotones a golpes de puños contra la autoridad que atendía la orden del presidente de la Cámara y vicepresidente de la República, el otrora intendente blanco por Cerro Largo Rodolfo Nin Novoa de desalojar el recinto parlamentario.
 Descalificable luego lo de la Fenapes de criticar el accionar de las autoridades ante tanta brutalidad y mal ejemplo, en donde pretendían hacernos creer que la que estuvo mal fue la Policía. Si esto fuera así, que no lo es pues las imágenes y los hechos demuestran lo contrario, nuestra educación y el futuro de nuestros hijos y nietos se alejan del espíritu valeriano.
 Por suerte en nuestro país existe un estado de independencia de la Justicia y ésta fue aplicada en forma acertada, dándole a los violentos de siempre lo que realmente se merecen. Procesamiento con prisión por atentado especialmente agravado. Entendió el Juez Penal Carlos García que los integrantes de la agrupación Plenaria Memoria y Justicia, impidieron, a través de la violencia, la actuación de la Policía custodia del ámbito legislativo.
 ¿Hasta dónde hubiesen llegado estos reos, de no haber mediado la Policía en el recinto?
Podremos estar de acuerdo o no con una ley, hay formas de discrepar, pero en democracia éstas no son las mejores prácticas y ejemplos que podemos dar.
Estamos hablando de docentes y estudiantes los que estuvieron involucrados en los hechos, los que no fueron simplemente a manifestarse por el solo hecho de estar en contra de la ley, sino que demostraron que con violencia pueden alcanzar sus objetivos.
 Lamentablemente este tipo de estados de ánimo nos está atrapando cada vez más a los uruguayos. Llegó el momento de parar la mano, no sea cosa que tengamos que arrepentirnos. El sinvergüencismo y oportunismo de estos descamisados están a la vuelta de la esquina. ¡Cuidado!
 Mahatma Gandhi dijo: “lo que se obtiene con violencia, solamente se puede mantener con violencia”.
Ruben Castelli