Rurales | 27 Dic La cadena ovina de Uruguay lanzó su Plan Estratégico de Acción que abarcará del año 2009 a 2015, para demostrar que “la oveja siempre puede”, convencidos de que Uruguay tiene y tendrá cada vez un rol más importante en la agroindustria mundial.
El Plan Estratégico de Acción 2009-2015 fue presentado ante la presencia del vicepresidente de la República, Rodolfo Nin Novoa, varios ministros y representantes de todos los sectores políticos y productivos del país.
La propuesta fue elaborada por más de un centenar de técnicos representando a todos los agentes de la cadena ovina.
Entre sus metas está el incremento de las exportaciones de productos diferenciados, a 490 millones de dólares, incorporando a 2.000 familias de productores pequeños y medianos que se juegan al ovino. Buscarán producir 48 millones de kilos de lana y llegar a una faena anual de 1.500.000 corderos.
El ingeniero agrónomo Gerardo García Pintos, presidente del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), señaló que la idea es hacer del sector ovino un rubro altamente competitivo, con una sólida cohesión de sus cadenas de valor, comprometido con el bienestar de sus agentes, la calidad de sus productos y la eficiencia de sus procesos.
Uruguay es un jugador de referencia mundial cuando del rubro ovino se trata: es el segundo exportador mundial de lana peinada en tops -lana lavada, peinada y cardada- y el tercer exportador mundial de carne ovina, a partir de una producción que maneja actualmente 9.500.000 cabezas y que ocupa dos millones de hectáreas (15% del total).
Hoy se producen 40 millones de kilos de lana y 45.000 toneladas de carne al año. El rubro genera U$S 321 millones anuales por concepto de exportaciones.
Pero las cifras pegan más fuerte cuando se analiza al sector como un neto generador de empleo en el medio rural. Son 20.000 productores y 10.000 trabajadores rurales, ocupa a 15.000 personas en la industria y a 3.000 trabajadores indirectos, distribuye U$S 14 millones en esquila y ocupa 8.000 puestos de trabajo zafrales.
Trabajo
El Plan estratégico fue elaborado gracias al trabajo de un grupo gestor que integró el Secretariado Uruguayo de la Lana, representantes de la cadena textil y de la industria frigorífica. También participó otro grupo conformado por productores, integrantes de las cadenas sectoriales, de instituciones vinculadas con ellas y de un grupo de referentes a través de entrevistas personales.
El trabajo llevó cinco meses de discusiones, identificación de las metas y diagnósticos de situación. Lo curioso fue que durante ese lapso se recibieron varios aportes internacionales y colaboraciones del público en general, a través de un Foro que se abrió en Internet.
El planteo
Mediante distintos programas se plantea llegar a la temporada 2014-2015 con un stock de 11.500.000 ovinos (dos millones más que hoy), que producirán 48 millones de kilos de lana (9 millones más que hoy) y 1.500.000 cabezas de corderos faenados (700.000 más).
En cuanto a las exportaciones, el Plan proyecta para el 2015 un total por U$S 490 millones (169 millones más que en la actualidad), siendo U$S 340 millones de lana (100 más), U$S 135 millones por carne (68 millones más), U$S 10 millones de ovinos en pie (se mantiene) y 5 millones por pieles ovinas (uno más que hoy).
El vicepresidente de la República, Rodolfo Nin Novoa, en nombre del Ejecutivo sostuvo que “vale la pena apoyar este plan, porque es un proyecto que salió de los esfuerzos de la propia cadena ovina”.
No pasó por alto que “existe tecnología disponible” para poder cumplir con las metas que se plantearon en la presentación, pero, lo más importante: “también hay productores receptivos a usar la tecnología disponible”.