Paysandú, Miércoles 14 de Enero de 2009
Locales | 09 Ene Esta semana la recorrida incluyó varias localidades del departamento, donde pastizales quemados, tajamares literalmente secos, cañadas, arroyos y ríos con considerable baja en su cauce natural pautan un verano que está resultando demasiado duro para los productores y vecinos del interior rural sanducero. Los incendios forestales y los animales pastando a los costados de rutas y caminos vecinales marcan una realidad que preocupa enormemente a sus habitantes y también a las autoridades.
Mientras ya son varias las localidades que tienen serias dificultades para extraer agua de sus pozos familiares, EL TELEGRAFO pudo saber que en la zona de Tomás Paz, en el límite departamental con Salto, algunos vecinos ni siquiera cuentan con agua para beber. En tanto, en Chapicuy, San Mauricio y Bella Vista la situación es similar a las de otras comunidades que están profundamente preocupadas por las elevadas temperaturas y aguardan ansiosos las lluvias que no llegan. Por su parte, un grupo integrado por el director de Promoción y Desarrollo, ingeniero Jorge Dighiero, los ingenieros Silvia Guerra y Roberto Ceriani, de Desarrollo Rural, y el director de Descentralización, Juan Laca, se reúnen permanentemente con productores y vecinos de las rutas 3, 26 y 90. En tal sentido, se han hecho eco de la situación en Guaviyú, Guichón y últimamente Chapicuy, donde vecinos y productores demandan una rápida atención a su problemática. Desde el Consejo Agropecuario se solicitó al Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca (MGAP) un aporte de 1.200.000 kilos de afrechillo de trigo y “esta cifra no es un capricho, porque se toma como referencia lo ocurrido en 2005, cuando se necesitó unos 700 mil kilos de ración para hacer frente a una situación similar por la que pasó esta zona del país”, precisó Ceriani. “Ya se hizo un relevamiento de productores que sí cuentan con forraje, para conectarlos con quienes necesitan de esta alimentación para el ganado”, agregó. “Estos movimientos incluyen el aporte de transporte del municipio, Conaprole dispuso de una cisterna y se solicitó a la Administración Nacional de Combustibles Alcoholes y Portland (Ancap) el aporte de otro sistema similar de depósito de agua. Los pedidos también se han extendido a la Administración de Ferrocarriles del Estado (AFE), en procura de contar con depósitos de agua de las estaciones que ya no están operativas, como así también del transporte de forraje en vagones, que poseen mayores volúmenes de carga”, señaló el profesional.
Por su parte, el ingeniero Jorge Dighiero informó que “se está trabajando en tres ejes fundamentales: agua potable para el consumo humano, agua para el ganado y forraje. De continuar esta delicada situación se estudia la necesidad de acopiar forraje para el otoño, en tanto si el problema se agrava en los próximos quince días habrá que tomar medidas urgentes y extremas. Por lo pronto, se procura trabajar ampliando las posibilidades de recursos en la solicitud de transporte y depósitos a otras dependencias del Estado, tales como el MTOP y Primaria. A la vez se solicitará a los vecinos de los lugares visitados una lista de necesidades personales en torno a este tema y así avanzar con la demanda”, indicó.
Paralelamente a estas medidas, en varios tramos de la ruta 90 un equipo de maquinaria municipal trabaja en la limpieza de desagües, detectando nuevas posibilidades de conseguir el vital elemento.
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