Rurales | 19 Ene Las mesas de gremiales lecheras, reunidas con la industria y con productores lecheros, decidieron declarar la emergencia de la lechería uruguaya. El presidente de la Cámara de Productores de Leche, Horacio Leaniz, dijo que en la reunión mantenida entre gremiales lecheras y la industria se coincidió en la necesidad de salvar a la vaca lechera.
“Proponemos definir al complejo lechero como patrimonio nacional. Hoy lo que más está en juego es la vida de esas vacas lecheras, que son las que le dan sustento a la cadena productiva. El problema es que hoy esas vacas lecheras no comen”. Agregó que hace un mes se solicitó una entrevista al ministro Ernesto Agazzi y no se ha recibido respuesta.
En un comunicado emitido tras la reunión de industriales y productores lecheros, se reclamó “declarar la emergencia de la lechería uruguaya, actividad inserta en una coyuntura productiva y económica crítica, pero con características propias que le exigen mantener los procesos de producción. Caminar juntos en un escenario muy difícil, que obliga a un compromiso de todas las partes en promover y sostener de cualquier manera la viabilidad del sector. Definir al complejo lechero uruguayo como ‘patrimonio nacional’ que como tal debe ser respetado y cuidado. La vaca lechera uruguaya es el primer eslabón de esa cadena a sostener”.
El comunicado continúa señalando que es necesario “reclamar la absoluta prioridad que la sociedad y el gobierno deben dispensar al sector, al que se le deben mantener condiciones de competitividad hoy desaparecidas. Exigir condiciones financieras amplias, con condiciones operativas inmediatas y acordes al momento, tanto para la producción como para la industria. En definitiva transmitir con total convicción y respeto la angustia y necesidad de compartir un camino complejo de la mano de un gobierno que debe ser atento y ágil”.
Grave
Leaniz agregó que muchos productores están “reduciendo” sus rodeos de vacas en los tambos por los efectos de la sequía y enviando vacas que pueden producir 4.000 litros de leche a los frigoríficos.
“Esto es una situación muy grave que no se puede recuperar en el corto ni mediano plazo”, advirtió. El gremialista explicó que alimentar las vacas solamente con raciones lleva a que muchos tambos “estén trabajando en rojo”.
Conaprole
El presidente de Conaprole, Jorge Panizza, expresó a El País que pese a las dificultades de los mercados “se continúan concretando negocios”, y agregó que por ahora la empresa “no tiene pensado cerrar plantas de leche ni enviar personal al seguro de paro”.
Según explicó Panizza es “normal” que en esta época del año la remisión de leche baje como consecuencia de la entrada del verano. “Los niveles de remisión que se tienen hoy en día son muy similares a los que se tenían el pasado año, quizás en los últimos días se pueda decir que se produjo una tendencia ligera a la baja”.
Consultado sobre la posibilidad de paralizar alguna planta por la merma de la remisión dijo que “por el momento no se piensa tomar ese camino”. Agregó que “es normal para Conaprole que en diferentes épocas del año cierre alguna de sus plantas”.
No obstante, el ejecutivo reconoció que “si la merma en la producción continúa se evaluará la posibilidad de cerrar alguna otra planta”.
Actualmente Conaprole tiene una planta cerrada que es la ubicada sobre la Ruta 1 donde se procesa leche en polvo. Hace unos 15 días estuvo cerrada la planta de San Ramón pero ya retomó su actividad con normalidad. Consultado sobre cómo viene la colocación de mercaderías en el exterior, Panizza dijo que “se han realizado unas cuantas colocaciones en los últimos días”. De todos modos, los precios en las ventas siguen bajos y la posibilidad de abrir nuevos mercados está bastante complicada. Actualmente se aguarda por una licitación para leche en polvo que lanzó Argelia. Los principales mercados que tiene la cooperativa para su producción hoy son Venezuela, México y Cuba.
En cuanto al precio de la tonelada de leche en polvo oscila entre 1.800 y 2.200 dólares. No obstante, Panizza aclaró que “cada negocio se hace con precios diferentes” dependiendo del país, el volumen de la mercadería y la forma de pago. Sin embargo, estos valores distan mucho del precio que tuvo a principios del año pasado cuando se llegó a vender la tonelada de leche en polvo por encima de los U$S 4.500. Según los expertos, la leche en polvo continuará este año con los valores actuales y descartan un incremento.