Paysandú, Miércoles 21 de Enero de 2009
Locales | 16 Ene El departamento de Paysandú cuenta con un interesante circuito termal, que durante todo el año atrae a turistas y a los propios pobladores del interior rural. Son varias las localidades del eje de las rutas 3 y 26 que programan excursiones en el centro termal Guaviyú y paralelamente, sobre el límite departamental con Salto, en las de San Nicanor. Los integrantes de los poblados sobre el eje de la ruta 90, por su parte, prefieren por comodidad y distancias al centro termal Almirón. En todos los casos, los arroyos que cruzan cerca invitan a los visitantes de turno a un contacto mucho más directo con la naturaleza, ofreciendo aguas con temperaturas por debajo de las existentes en las piscinas de cada complejo.
Precisamente, la recorrida de la Sección Interior de esta semana incluyó San Nicanor, Almirón y Guaviyú, donde pudimos constatar una muy buena presencia de público, preferentemente integrado por familias. La única sorpresa fue que, al llegar al primero de los destinos nombrados, hallamos el complejo cerrado desde el 26 de diciembre y hasta el próximo 18, porque ha sido contratado por un grupo de salesianos.
La recorrida prosiguió con la visita al centro termal Almirón, en la ruta 90. Allí nos encontramos con vecinos de Orgoroso, Piedras Coloradas, Estación Porvenir y lógicamente, por una razón de corta distancia, con gente de Guichón.
En las termas de Guaviyú, en la ruta 3, estuvimos con visitantes de Queguayar, Quebracho y Chapicuy, confirmando que las termas son un destino recurrentemente elegido por quienes, por motivos económicos, de distancia o simplemente por predilección, cargan todo lo necesario y marchan a estos lugares. Que les ofrecen generosos espacios verdes, cómoda hotelería, moteles y plazas de comida, aunque muchos son los que prefieren levantar campamento lejos del bullicio y en contacto mucho más directo aún con el arroyo y el sonido de las aves retumbando en los oídos, en un entrono que les permite disfrutar de una carne asada a la vieja usanza, como lo hacían nuestros antepasados criollos.
Una tradición que en la actualidad se conserva con todo el ritual de aquel entonces, saboreando una bebida que esté en sintonía con el consumo de la carne roja.
En todos los casos existe una sola consigna: disfrutar del ocio la mayor cantidad de horas y días posibles, tratando en cierta forma de frenar el transcurso de las horas y así hacer más placentero y perdurable el tiempo con el que se cuenta para desconectarse de la rutina laboral.
EDICIONES ANTERIORES
A partir del 01/07/2008
Ene / 2009
Lu
Ma
Mi
Ju
Vi
Sa
Do
12
12
12
12
Diario El Telégrafo
18 de Julio 1027 | Paysandú | Uruguay
Teléfono: (598) 47223141 | correo@eltelegrafo.com