CENTRO DE DESARROLLO
GUICHÓN INNOVA

Locales | 30 Ene Las nuevas tecnologías, aplicadas a las múltiples posibilidades que presenta el moderno mercado laboral, están llegando a comunidades en las que tiempo atrás sus habitantes no imaginaban acceder. La incidencia que la informática e Internet tienen hoy en nuestra cotidianidad, en muchos casos supera lo imaginable y seguramente nuestros proyectos de vida estén estrechamente ligados a ellas.
En Guichón, un proyecto empresarial nuclea a un grupo de personas que, tras un proceso de instrucción y capacitación, desarrollan un innovador programa de trabajo a distancia apuntando a obtener nuevos mercados.
EL TELEGRAFO visitó nuevamente el Centro de Desarrollo Guichón Innova, un moderno edificio montado con soporte tecnológico de avanzada, que permite que grupos de personas se introduzcan en este nuevo mundo, a efectos de poder aplicar las nuevas herramientas que ofrece la informática aplicada al asesoramiento de empresas en manejos contables y afines.
El contador Gabriel Vale, coordinador del programa del Centro de Desarrollo Guichón Innova, relató que “el proyecto avanza satisfactoriamente y las personas que están en la segunda etapa de la capacitación, en el período de pasantía, evolucionan muy bien”.
El proyecto comenzó en abril de 2008 con treinta personas y consistía en una capacitación técnico-práctica de seis meses. Finalizada esa etapa, a mediados de agosto, “quedaron unos quince participantes para la segunda fase, que incluye una pasantía que comenzó en setiembre y finaliza en febrero”. Actualmente el grupo, integrado por participantes de Merinos, Sarandí del Yi, Paysandú ciudad y Guichón, se encuentra en un proceso de modificación de algunas de las herramientas. Se ha confeccionado a través de cuatro grupos de trabajo y se les ha asignado un tema en particular.
Vale detalló, además, que “se traslada una forma de funcionamiento actual de Bantotal con otra metodología. Por otro lado, se ha trabajado con clientes particulares de Argentina, que están en producción y utilizando los servicios de Bantotal, y otros que se encuentran en proceso de instalación. El grupo percibe un sueldo básico del entorno de los 5500 a 5800 pesos, lo mínimo para trabajos de software de acuerdo al último consejo de salarios. Una vez que finalice esta etapa se procede a una evaluación individual adicional --comportamiento y funcionamiento en general-- y en función de ella podrá continuar o no a partir de marzo. Quienes continúen en el proyecto podrán acceder a un contrato anual con la empresa y una mejora de sus salarios.
Por el momento la idea es que la gente que participa del proyecto siga trabajando a distancia. De todos modos, hay casos excepcionales y particulares que, de acuerdo a las necesidades de la empresa, va a ser necesario viajar algunos meses a Montevideo y a Argentina, posiblemente este año.
En un futuro no tan lejano --posiblemente en un par de años--  uno de los propios participantes podrá quedar a cargo como referente local del proyecto”, agregó el contador.