Rurales | 04 Feb Las precipitaciones que se registran desde la semana anterior en gran parte del país, pero en especial en Paysandú y los principales departamentos de condición agrícola ubicados en el litoral uruguayo, son muy beneficiosas para los cultivos de segunda.
Según datos recabados por EL TELEGRAFO entre productores de diferentes puntos del departamento, las lluvias de este martes “vinieron muy bien para los campos, luego de los registros por demás interesantes de la semana pasada”.
En la zona de El Eucalipto llovió 40 milímetros, Paso del Parque 35, Soto 30, Guichón y Piñera 28, ciudad 14, Arroyo Malo 10. En algunos lugares también fue por “mangas”, ya que en un establecimiento de la zona de Guaviyú llovió 10 mm, pero a unos 6 kilómetros de allí el pluviómetro registró 30.
Un productor del norte del departamento fue gráfico al definir la situación: “ahora empezó a verdear, pero los pobres animales lo llevan al contado”, en referencia a la escasa disponibilidad de pasto y lo lento de su crecimiento, ante la escasez forrajera. También varios departamentos del interior del país tuvieron lluvias de consideración en las últimas horas y se pronostica que la situación permanezca en los próximos días. Según el índice pluviométrico de la Dirección Nacional de Meteorología, Río Negro fue el departamento que registró el mayor registro, con 80 mm. Lo siguen Paysandú (Estación Piedras Coloradas) con 70, Flores (Estación Paso de Lugo) con 58 y Tacuarembó (Estación Paso de los Toros) 54. En Montevideo hubo un registro de 26.
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Las variantes me-teorológicas han sido determinantes de los vaivenes en las cotizaciones del mercado agrícola. Durante buena parte de la semana pasada, los precios fueron subiendo por la falta de lluvias en el Mercosur, que amenazaba los cultivos. Las lluvias tuvieron la abundancia suficiente como para provocar bajas importantes en los precios este lunes, que se vieron consolidadas por la persistente flojedad en la economía internacional. En el mercado local el precio del trigo se elevó hasta el rango de entre U$S 200 y U$S 205 por tonelada pagado por la exportación, aunque en los últimos días el mercado está un poco menos activo. Todas las miradas están puestas en cuando Brasil comience a importar desde fuera de la región y los precios que manejará, así como si levanta el Arancel Externo Común. Aunque vinieron las lluvias que permiten plantar verdeos o sorgo y maíz para grano húmedo, en el corto plazo la demanda por alimentación sigue siendo firme y la oferta restringida. Los precios se habrían estabilizado entre U$S 210 y U$S 215 la tonelada a levantar. La oferta de trigo brotado o cebada es poca y los precios son muy elevados en relación con otros productos. Las precipitaciones de la semana pasada trajeron tranquilidad, fundamentalmente para los cultivos de segunda de soja, permitiendo en algunas áreas con buena cantidad de agua recibida asegurar una buena implantación. Los cultivos de primera ya habían comprometido rendimiento, aunque las lluvias permitieron que no se perdieran más plantas. El escenario todavía no está claro y eso hace que las operaciones por soja sean muy puntuales, con alguna referencia entre U$S 330 y U$S 340 por tonelada.