Locales | 12 Feb Vecinos de Barrio Chaplin expresaron a EL TELEGRAFO su preocupación ante la paralización de las obras del Programa de Integración de Asentamientos Irregulares (PIAI) en la zona, a mediados del año pasado, tras lo cual el área en construcción ha sido saqueada por malvivientes.
Las obras del PIAI en el lugar fueron detenidas, ya que rescindió el contrato con la empresa MIR S.A. Si bien se esperaba que las construcciones fueran retomadas a la brevedad, aun no hay noticias.
“No nos dijeron cuándo retomarían las obras”, explicó un vecino. Tampoco les fue anunciado que el sereno, encargado de vigilar la policlínica en construcción, dejaría de asistir.
Al paralizar la obra, la Intendencia Municipal de Paysandú contrató a un sereno para prevenir el robo de los materiales que todavía no habían sido utilizados. Sin embargo, éste abondonó su puesto el 23 de diciembre. Si bien la comuna no informó a los habitantes del barrio sobre el asunto, los mismos vigilantes comentaron que, aparentemente, ésta dejó de pagarle a la empresa de seguridad. Por esta razón, todos los materiales han sido robados y el edificio, a medio construir, está siendo paulatinamente saqueado. En la madrugada del lunes, un traseúnte sorprendió a un grupo de ladrones intentando quitar una chapa del techo. Si bien la policía ha reaccionado con rapidez frente a las denuncias emitidas, la respuesta de la Intendencia no llega.
Consultado sobre si los vecinos han intentado organizarse para cuidar ellos mismos de los materiales, explicó que estuvieron pensando en armar una nueva comisión con integrantes de los once barrios que abarcaría la policlínica. No obstante, debido a que muchos están de licencia o trabajando en otras ciudades, no se ha podido concretar.
Reparto de materiales
A pesar de la paralización de las obras, la Intendencia se comprometió a entregar materiales para continuar la autoconstrucción de las viviendas. Efectivamente, esto se llevó a cabo hasta fin de año. Sin embargo, la última repartición no se completó y varios materiales debieron quedar en la casa de uno de los vecinos del barrio.
SANEAMIENTO
Las obras de saneamiento también han sido paralizadas. Hay pocas casas que no dependen del pozo. “Nos hablan de prevención y seguimos dependiendo del pozo negro”, lamentaba un morador de la zona. “Nosotros presentamos un proyecto, aprobado por el presupuesto participativo, para que todo el barrio contara con saneamiento”. A pesar de haber estimado costos y de haber hecho algunas averiguaciones, esto también quedó en la nada. “Es una pena”, explica el entrevistado, “porque el saneamiento, más que un lujo, es una necesidad”.
ALUMBRADO
En cuanto al alumbrado, cuentan con las luces que existían antes de las reformas, pues las nuevas no han sido habilitadas. “Colocaron nuevos focos en la plaza y en algunas callecitas, pero no hay nada habilitado”.