FABIO DALMÁS

Deportes | 18 Feb Llegó, pasó algunas horas en familia y volvió a entrenar. Fabio Dalmás no quiere dar un centímetro de ventaja, y tras retornar de Chile con el vicecampeonato Sudamericano de voley playa a cuestas ya mira la próxima etapa del circuito continental, a llevarse a cabo el fin de semana en las arenas de la capitalina playa Pocitos. Junto al montevideano Nicolás Zanotta, el sanducero accedió al segundo lugar en Viña del Mar, donde la pareja cedió en el segundo y tercer set frente a los chilenos Marco y Esteban Grimalt. Pero ya es tiempo de revancha. Al menos es lo que intentará la dupla celeste.
“Hablábamos con Nicolás que si estaba bien de la espalda ese partido final no lo perdíamos. Hubo puntos en los que me faltó oxígeno, porque la lesión me complicó mucho más allá de que los antiinflamatorios me aliviaron”, dijo el sanducero tras retornar a nuestra ciudad.
A la noche, después de haber quedado segundos en la etapa chilena del Circuito Sudamericano, la dupla uruguaya volvió a mirar por televisión el compromiso final. “Se notó que no estaba bien, y me tiraron todas a mí porque mi salto ya no era el mismo”, se lamentó Dalmás.
“Fue todo el torneo complicado, pero el partido más difícil fue el que jugamos en cuartos de final ante Williman-Rodríguez (la otra dupla celeste). Nos ganaron bien el primer set, lo dimos vuelta en buena forma y en el tercero nos impusimos 15 a 13. Fue un partidazo. Después vino Argentina, pero ya no fue tan duro”, recordó. Ya en el tramo final del torneo, los celestes esperaban por conocer su rival en la final. “Fue un duelo de chilenos, porque se enfrentaron Tobar-Manzur con los primos Grimalt. Son muy buenos, altos y saltan mucho, por lo que se hace complicado. En la final ganamos el primer set pero ellos aprovecharon nuestros errores en el segundo y el tercero. Pero las dos parejas vienen a Montevideo, así que tendremos la posibilidad de una revancha ya el fin de semana”, dijo Dalmás.