Locales | 21 Feb Ante nutrida concurrencia, en la que se contaron autoridades departamentales –incluyendo al intendente Julio Pintos--, legisladores, representantes de varias instituciones y organizaciones locales, además de numeros ciudadanos, el consorcio Liderdat S.A. presentó públicamente el proyecto denominado Energía Limpia Paysandú (ELP), en el marco de una instancia que es establecida como requisito del Protocolo de Kyoto para poder acceder a los bonos del carbono para complementar su financiación.
La audiencia, en la que se pasó registro de asistencia y a la vez fue grabada en audio y video para responder a los requisitos, contó con la presentación del proyecto en sí por el presidente del directorio de Azucarlito, Ing. Miguel Fraschini, así como de la empresa Coraldin, asociada al proyecto, además de exponer sobre los mecanismos del Protocolo de Kyoto y las razones por las cuales este proyecto apunta a ser incluido en el acuerdo, que apunta a evitar el depósito de gases de efecto invernadero, para evitar el calentamiento global. La audiencia apuntó a presentar a las partes interesadas y quienes se sientan involucrados en esta problemática, los alcances del emprendimiento en base a lo exigido en los procedimientos que regulan el Mecanismo de Desarrollo Limpio del Protocolo de Kyoto en Uruguay.
De acuerdo a lo expuesto por los responsables de Liderdat , el proyecto contribuye tanto al desarrollo sostenible del país como a la reducción de emisiones de efecto invernadero, por lo que cumple con los requisitos básicos para ser registrado en el Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) del Protocolo de Kyoto de la Convención de Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Climático.
Tras la presentación del proyecto, que apunta a generar unos cinco megavatios de energía eléctrica mediante el uso de residuos forestales, se abrió una ronda de preguntas y presentación de inquietudes por el público, entre las que se incluyeron interrogantes como el destino del agua que se bombeará desde el río Uruguay y si en su retorno al cauce el líquido se vierte a elevada temperatura.
Los ingenieros respondieron que el agua es reciclada dentro del complejo, por lo que solo se utiliza un volumen significativo en la primera oportunidad, y el vertido al río es por lo tanto mínimo, para reponer el agua que se pierde por evaporización para enfriamiento.
Por otro lado, explicaron que los únicos residuos sólidos que quedan del proceso es la ceniza, en un volumen que es solo del orden del uno por ciento del tonelaje de residuos utilizado en las calderas, y que este volumen se utiliza como relleno dentro del mismo predio de Azucarlito, en tanto no se descarta que en el caso de que de la ecuación económica, pueda utilizarse como abono, por su alto contenido de carbono, entre otros elementos.
En general hubo amplia receptividad y complacencia por la iniciativa, teniendo en cuenta que lejos de ser un proyecto de riesgo para el medio ambiente, se trata de un emprendimiento comprometido que apunta a evitar el efecto invernadero, y por lo tanto se gestiona su financiación parcial a través de los bonos de carbono inscriptos en el mecanismo del Protocolo de Kyoto.