Solicita el diputado Álvaro Delgado

Locales | 18 Feb Para el diputado nacionalista Alvaro Delgado los recursos que el gobierno vuelca a través de Ancap sin retorno al emprendimiento sucroalcoholero de Bella Unión, deberían afectarse a bajar el precio de los combustibles y otros destinos de interés general. El legislador precisó a EL TELEGRAFO que “desde el comienzo de la presente administración, el gobierno ha intentado por todos los medios posible, la instalación de la producción de caña de azúcar en el Litoral Norte del país. Este experimento por ahora ha tenido resultados bastante malos y las autoridades han sido muy reacias a entregar información del mismo. El gobierno ha tenido una postura muy cerrada en el tema, desoyendo cualquier clase de consejo y señalando que el proyecto tiene futuro pero sin aportar un elemento que lo demuestre”. Recordó que Alcoholes del Uruguay (ALUR SA) es una empresa colateral de Ancap, con la participación, originalmente de la Corporación Nacional para el Desarrollo, que elabora azúcar en Bella Unión a partir de caña de azúcar de la zona, y a su vez financia las plantaciones de la misma. Tiene previsto además realizar otras actividades relacionadas como la generación de energía a partir de la misma materia prima. Para esto ha realizado inversiones por cifras millonarias y se propone realizar otras adicionales.
“Hasta el momento, la empresa ha tenido importantes pérdidas y se ha encontrado con varios inconvenientes en el desarrollo del proyecto; en particular, el clima ha afectado los rendimientos del cultivo en los últimos años, lo que ha alentado las críticas al emprendimiento”, observó. Consideró Delgado que “el Estado ha sido poco o nada transparente en este tema. Los últimos estados contables de ALUR son de diciembre de 2006, y ni pensar en ninguna otra clase de información”.
“Lo único que se conoce es que Ancap le ha prestado varias decenas de millones de dólares para su operación”.
Subrayó que Ancap, “al destinar recursos a este emprendimiento (más de 70 millones de dólares), está utilizando fondos que podrían ser destinados a otros objetivos, incluso bajando los precios de los combustibles, o haciendo más eficiente la refinería, y si el proyecto fracasa, lo habrá subsidiado cargando este costo en sus otros productos, que ya soportan varias ineficiencias”. A juicio de Delgado “el foco del proyecto debe estar en la generación de energía sustentable, donde la caña de azúcar sea uno de los insumos, pero no necesariamente el más importante. La elaboración de azúcar refinado y alcoholes puede ser el complemento, pero no el rubro principal”.
Observó que “se deben buscar formas de financiamiento genuinas del proyecto, con fondos que aporten diversos inversores privados a través de mecanismos de mercado. Para esto sugerimos dos alternativas, que pueden ser complementarias: la primera es la capitalización de ALUR SA, mediante la oferta de una parte de sus acciones en una bolsa de valores. Esto otorgaría fondos líquidos a la empresa, con los cuales realizar los proyectos planificados y no sería necesaria la participación mayor de Pdvsa ni otro que condicione el negocio. Para esto es necesario un compromiso de estabilidad de condiciones acordadas de objetivos y gestión, de continuidad del proyecto, que incluya los necesarios consen-sos políticos”.
“La segunda es la formación de un fideicomiso con los ingresos de la venta de azúcar de la zafra, colocando dichos títulos entre inversores institucionales y/o privadas que permitan financiar la etapa productiva del proceso”, expuso.