Locales | 19 Feb “Este trabajo en La Chapita no termina con el realojo de estas veinte familias, sino que sigue simultáneamente con los que se quedan”, dijo Adriana Imperial. En este sentido, amplió que “los que se quedan tienen que asumir que ahora les toca a los primeros veinte, y seguramente van a estar mirando cuál es el proceso que se da con los que se van primero”.
El total de familias que ocupan terrenos en el barrio La Chapita son 126, de las cuales 20 “voluntariamente aceptaron el realojo, porque no se les puede obligar. Pero ahora dependerá de cómo se vea este proceso, cómo se maneje y que nos vuelvan a conceder fondos del mismo Focem o de otro proyecto. Y también que la gente que se queda hoy vea que vale la pena irse, aunque el esfuerzo es grande porque después de trabajar todo el día deberán pasar algunas horas más construyéndose la casa”.