Locales | 22 Feb De bolazos oficiales
Nadie tiene tanto crédito en política como el tupamaro devenido en senador ministro, senador y precandidato a presidente (¡Dios nos libre!), José Mujica. Porque decir en estos momentos un político: “me tienen podrido con la inseguridad, y que se vayan a Rio de Janeiro o Venezuela, etcétera, etc...” y lograr que lo aplaudan igual, es verdaderamente insólito. Por supuesto que los que lo aplaudieron lo hicieron de chupamedias, y porque está de moda ser hincha del “Pepe” Mujica, porque muchos de ellos deben haber sufrido en carne propia o algún familiar o conocido, algún hecho de violencia, y verán como todos nosotros lo que pasa en las calles, en la TV, lo que afecta a toda la sociedad. Pero claro, lo dijo Mujica con ese vocabulario ordinario que es lo único que rescatan sus chupamedias y que es además la única forma que logre que le presten atención sus admiradores, porque no dice absolutamente nada que sea digno de analizar. El día que se decida a hablar sin el aditivo de sus bolazos, va a perder la atención de su público porque es lo único que lo caracteriza. ¡Por favor! Si a este disparate lo hubiera dicho cualquier otro político, de cualquier partido, el suyo o de la oposición, poco menos que lo crucificarían públicamente.
Y si está podrido de este tema haga algo, senador. ¿O no es usted parte de este gobierno? ¿O pretende que la gente, los medios de prensa, la oposición o quien sea, traten de ocultar lo que está pasando todos los días, o digan que está todo bien, solo para que Ud., excelencia, no esté podrido? El común de la gente sí que está podrida de vivir en esta selva en la que nadie manda ni nadie obedece, en la que los delitos no se pagan, en la que los delincuentes son las víctimas de esta sociedad que los empuja a delinquir según su sabio entender. Por ahora su forma de hablar (exagerada, por supuesto, por interés propio) le ha dado réditos a Ud. y al FA que con sus bolazos y ordinarieces ganó las elecciones. Y mientras Ud. siga flotando en esa cómoda placenta que le fabricaron sus fanáticos y en la que su partido le permite permanecer, se seguirán regocijando con sus bolazos. Porque Ud. no es oficialismo ni oposición y es las dos cosas a la vez. Seguirá con su chapa de pobre chacarero aunque cobre el “sueldito” de senador. A Ud. no le roza nada, senador, y justicieramente se puede decir que no ha hecho nada mal como ministro o senador, porque no ha hecho nada. Presidente, senador, porque es la única forma que se puede romper esa placenta y ya la gente no encuentra tan graciosos sus disparates. Si fuera tan inteligente aceptaría que el solo hecho de haber sido tupamaro y haber estado preso no lo hace un buen político ni mucho menos un buen candidato a presidente. Independientemente de la simpatía que genera en alguna gente su forma de “actuar” (actuar de actuación teatral), suya debería ser la decisión de que ya llegó demasiado lejos de acuerdo con sus condiciones, y que sus metas revanchistas ya fueron alcanzadas. Responsablemente debería irse para su chacra con la satisfacción de haber tenido su minuto de fama. Un paso más adelante podría ser nocivo para Ud. y su imagen, y ni que hablar para el país.
Florentino