Locales | 08 Mar El secretario de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas Queguay- Charrúa, Elbio Acosta Penayo, reclamó que se retome la castración masiva de perros, teniendo en cuenta que el factor clave para la reducción y control de canes callejeros pasa por la continuidad de las políticas que se desarrollen con este fin.
Manifestó que en los primeros días de noviembre de 2008 se realizó la castración “patrocinada por la Intendencia de Paysandú y un muy buen grupo humano trabajó en forma honoraria colaborando con el profesional que contratara la Intendencia luego de un proceso licitatorio”.
Puntualizó que lograron muy buenos promedios de animales castrados por día, llegándose a un ritmo de unos 120 por jornada.
“ El último día de castración quedaron unas 250 personas que habían llamado y llegaron hasta el lugar, pero la orden de la Dirección de Higiene fue terminante y desde aquel día no se castró más, a pesar que durante 2007 se castró hasta mediados de diciembre. Unos de los argumentos esgrimidos fueron las temperaturas altas”, sostuvo.
Acotó que ya hoy han transcurrido “tres largos meses y entendemos que se debería retomar las castraciones, pues de lo contrario todo el esfuerzo y el dinero gastado no servirán de nada y será tiempo y plata perdida”.
Recordó que “las castraciones en el mundo han sido instrumentadas como programas preventivos y eso permite reducir sensiblemente la población de animales callejeros y controlar responsablemente la tenencia de las mascotas en los hogares”.
“El programa de castraciones debe implementarse como una alternativa definitiva por su eficacia y ética, para realizar el control y/o regulación poblacional de los animales. No deberíamos estar a la espera de que la Dirección de Higiene se le ocurra continuar o no con las castraciones cuando hay tantos focos aún para atacar en la ciudad. Hay cantidad de vecinos en los distintos barrios esperando para castrar su mascota o al perro del barrio al que le dan de comer entre varios vecinos”, destacó.
Observó asimismo que “desde la Dirección de Higiene presionan a la Comisión de Legislación de la Junta, para que en el nuevo proyecto se incluyan la captura y su derivación a lo que serían verdaderos campos de concentración de perros, de donde los dueños no siempre van a buscarlos”.
“Pueden consultar a las intendencias de Maldonado y Soriano, donde les pueden informar qué les pasó cuando levantaron animales de la calle y cuánto les cuesta mantenerlos y cómo se matan entre ellos, al haber demasiados en un mismo predio”, a la vez de considerar los elevados costos de mantención que insumiría y se preguntó “qué pasaría con los perros si un día no hay rubros para comprarles comida”.