ESCRIBE EL DOCTOR RODOLFO CANABAL

Locales | 17 Mar En el ámbito parlamentario, integrantes del sector del Frente Amplio han planteado la posibilidad de aplazar --por entender que el actual período preelectoral  puede no ser el momento más adecuado para su análisis-- el trámite de algunas iniciativas que existen para la aprobación de reformas legales importantes, que han dado lugar a  dudas  y también a disidencias  sobre su pertinencia, sustentadas por  otros sectores  de dicho ámbito. Se debe considerar pertinente tal sugestión, de la cual ha informado el diario El País,  según resulta de lo que se ha de explicar enseguida.
La referencia es, fundamentalmente,  a los  proyectos de leyes que proponen modificar el Código de la Niñez y la Adolescencia que se indican a continuación: el que refiere a los casos de abuso sexual a menores, el que fija modificaciones al régimen penal y al proceso de detención, pero fundamentalmente  el que reforma el régimen de la adopción, el cual quedaría equiparado a la legitimación adoptiva, centralizaría el control en el INAU y, entre otras reformas, permitiría que fueran adoptantes parejas de concubinos que pueden ser, indistintamente, hetero u  homosexuales. También milita entre dicho conjunto de leyes el relativo al cambio de sexo. Tienen media sanción  los  relativos a adopción y a cambio de sexo. La trascendencia de tales proyectos y además la circunstancia de existir, según es notorio, importantes disidencias relativas a su contenido, hace sin lugar a ninguna duda indispensable no solo tal aplazamiento, sino que su tramitación se realice de tal manera que su definición sea necesariamente posterior a una etapa amplia de consultas a sectores técnicos y sociales con amplio conocimiento sobre   los problemas que la iniciativa comprende y  también a todos los sectores políticos nacionales.
En tal sentido, se coincide plenamente con el representante nacional doctor Jorge Orrico, de Asamblea Uruguay, que es también  abogado con mucha experiencia profesional,  quien con relación a  los proyectos  sobre adopción y cambio de sexo ha sugerido que se convoque al Parlamento a integrantes de las respectivas cátedras y a sectores de la sociedad que deseen informar. Considera, según se expresa en la crónica de El País precitada, que en el Senado el proyecto de ley de adopción se votó demasiado rápidamente  y tiene duda acerca de  si se  convocó  a alguien a opinar en relación al proyecto sobre cambio de sexo, sobre  el cual señala que no requiere cambio biológico y que puede tener consecuencias patrimoniales. Agrega que esas dos iniciativas “no están en los planes y programas de ningún partido” y que “son temas que atraviesan a toda la sociedad y a todos los partidos”, por lo cual consideró complejo aprobarlos en año electoral, pues primero “habrá que escuchar a todos”.   
Además, tal como varias veces hemos señalado, cuando se abordan posibles modificaciones en la legislación codificada es menester proceder con gran cautela, después de amplio asesoramiento especializado, pues los códigos tienen una forma de elaboración que determina un contexto profundamente estudiado e  inter-relacionado, que impone  que no se deba  alterar sin que exista certeza técnica de la necesidad del cambio y de que no afecta la unidad de su estructura. Y ello es especialmente indicado en los casos en que se trata de elaboraciones codificadas  relativamente recientes como, verbigracia, es el caso  del código precitado promulgado por la ley Nº 17.823 de 7 de setiembre de 2004. Por todo lo que resulta de lo expuesto, y por la trascendencia de los temas que abarcan los mencionados proyectos,  es muy claro que las dudas que al respecto  han exteriorizado algunos legisladores sobre la inconveniencia de abordar la etapa final de su trámite legislativo  está debidamente fundada. En consecuencia, es de muy  claro interés general someter su análisis a una etapa previa de consultas,   tal como resulta de las sugestiones que se reseñan en los desarrollos que preceden.