Enrique Rubio, director de OPP

Locales | 21 Mar Debería separarse la tarea que actualmente desarrolla el Instituto  Nacional del Menor (INAU) con la minoridad infractora de la que aborda para más de 60.000 niños en todo el país en una serie de apoyos de carácter social, señaló a EL TELEGRAFO el director de la  Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Enrique Rubio, quien manifestó que debería separarse el  Interj (Instituto Técnico de Rehabilitación Juvenil) del referido organismo a efectos de que pueda encararse una mejor  tarea de rehabilitación y contención de la minoridad infractora.
Consideró a la vez que debería sustraerse las cárceles del ámbito del Ministerio del Interior, en forma complementaria a este planteo. Precisó el integrante del Poder Ejecutivo que “para mí va a ser reforma del Estado en el próximo período sacar al Interj del INAU y sacar las cárceles del Ministerio del Interior”.
“Institucionalmente el INAU tiene 67.000 niños en planes que han tenido un avance muy importante y en los cuales se ha invertido mucho, que habrá que mejorar, y esa es la sustancia del INAU.
La minoridad infractora  tiene desde problemas medianos  a extremadamente graves y son algunos cientos de muchachos, algunos de los cuales han cometido crímenes atroces. Eso exige políticas y programas específicos que son  diferentes a mi juicio del resto de la población que trata el INAU”, manifestó.
“Yo soy partidario --y eso se puede hacer solo con un proyecto de ley, que lleva tiempo-- de una separación desde el punto de vista institucional y crear un organismo específico que se ocupe del tema de la minoridad infractora, con políticas específicas”, indicó el entrevistado.
“Ahora no se puede hacer, porque no hay tiempo, y por lo tanto se tratará de resolver”, pero “soy partidario de que se cambie, y eso es parte de la reforma del Estado.
Hay que  hacer rehabilitación y contención, al mismo  tiempo, pero en el marco de una política específica.
Este debería ser un organismo diseñado a mi juicio en otra dirección, y ha sido fortalecido en  forma muy importante toda esa parte que atiende la infancia desprotegida y abandonada de nuestra sociedad, que es un problema de todos los uruguayos”, evaluó el entrevistado.
“Se ha avanzado por ejemplo en los CAIF y otros planes que ya  venían. No decimos que hayamos inventado todo lo que se está haciendo, pero se han modificado, redimensionado, continuado, etcétera.
Pero creo que institucionalmente hay que crear un órgano especial, y va a llevar  todo un tiempo parlamentario de discusión, por lo que es una tarea del próximo gobierno”, sostuvo.
Reconoció que también se necesitan mejores instrumentos legales, pues “hay que hacer cambios, hay que dotarlo de instrumentos, hay que hacer algo propio, porque es una problemática que no puede mezclarse con la de los presos comunes, que no son minoridad”.
“Estos son programas especiales que se dan en todas partes del mundo en la experiencia internacional comparada”, agregó, en tanto Rubio consideró que las soluciones no pasan por la rebaja de la edad de imputabilidad, “sino que para mí se arregla con programas específicos en dirección al tema de los jóvenes, con políticas de inclusión social a largo plazo”, ante “los códigos y los problemas, los valores adquiridos por menores en sectores marginales, lo que exige un trabajo a largo plazo”.