Locales | 27 Mar El salón comunal municipal de Parada Esperanza, donde funciona la escuela 58, contará en breve con mayores comodidades para los niños y maestros que asisten a clases en ese edificio. La obra incluye dos salones divididos por paredes de mampostería, cielo raso, pisos, ventanas, puertas, revoques y pintura. La construcción aprovecha un techo existente, que cubre un ala abierta ubicada hacia el este de la estructura principal. Las tareas son ejecutadas por obreros de la comuna, mientras que los materiales son suministrados por la Administración Nacional de Educación Pública.
Si bien la ampliación no es la solución definitiva para atender la demanda de una nueva escuela, permitirá descomprimir los espacios de una estructura que fue concebida originalmente para otros fines. Está previsto que los trabajos culminen antes de Semana Santa y mientras las clases se dictan en el salón principal y en la cocina.