Energía

Locales | 21 Abr El escenario más probable es que tendremos un nuevo invierno con problemas de déficil hídrico, lo que complicará una vez más el abastecimiento energético del país. En opinión del ministro de Industria, Energía y Minería, ingeniero Daniel Martínez, “este año vamos a seguir, lamentablemente, con el corazón en la boca” y dependiendo del suministro energético que puedan brindar Brasil o Argentina.
Solamente entre febrero y marzo, Uruguay pagó a Brasil 30 millones de dólares por el servicio de suministro energético. Durante abril UTE pagará unos 500.000 dólares por día por peaje para la reconversión de la energía brasileña que ingresa a Argentina mediante el sistema privado ubicado en Garabí, donde los 500 megavatios que se compran pasan de 60 a 50 ciclos.
La vía que Uruguay tiene para ingresar directamente energía desde Brasil es a través de un conversor en Rivera, pero no alcanza más que 70 megavatios. La posibilidad de contar con una interconexión propia estará concretada en unos tres años porque “son cosas que llevan tiempo, obras gigantescas”, dijo Martínez.
En este momento, las represas cuentan con agua para producir energía --la que han acumulado en base al ahorro-- pero se están usando en forma limitada para guardarla para el invierno, cuando será más difícil contar con energía desde los países vecinos.
“Hablamos con
Mandrake y Merlín”
“Hemos hablado con Mandrake y el mago Merlín para buscar una solución pero no hay forma”, bromeó el ministro de Industria y Energía al aludir a las escasas posibilidades de que mejore el panorama energético nacional a corto plazo.
“La energía es un tema estratégico que no resuelve el mercado, aunque nuestro país estuvo 15 años sin invertir en energía y estamos pagando las consecuencias. Tuvo que haber apagones en el ‘89 para que se entendiera que había que actuar y recién en 1991 se realizó la inversión en La Tablada para respaldo energético a través de la generación térmica”, dijo a EL TELEGRAFO.
Martínez recordó que Uruguay tiene una gran capacidad de generación hidráulica “pero el problema es que --cada vez más por el cambio climático-- contamos con menos del 10% de la potencia teórica de nuestras centrales en una economía que en los últimos años vino creciendo e hizo crecer la demanda eléctrica. La falta de respaldo hizo que pasara lo que pasó: en 2004, 2005 y 2006 estuvimos al borde de los apagones. El 2007 fue un año de mucha lluvia y 2008 vino con problemas. El 2009 también viene con problemas”, añadió.
APUESTA A LA DIVERSIFICACIóN
El ministro destacó que “hoy Uruguay cuenta con un plan estratégico de energía a 2030 en base a la diversificación”, lo que incluye una apuesta fuerte a las energías alternativas, la convocatoria en julio próximo a licitación para la instalación de una planta de regasificación para contar con una central de ciclo combinado a gas y el estudio de la producción de energía eléctrica en base a carbón y de la energía nuclear.
No obstante, advirtió que estas últimas iniciativas se podrán concretar a largo plazo. “Salvo la gente que quiere convertir a Uruguay en una república bananera o el Irán de América Latina, lo que se puede decir es que estamos estudiando la instalación de una central nuclear pero se necesitarán unos 15 años para contar con gente capacitada y estar en condiciones de operarla”, sostuvo.
En cuanto a la planta de energía a carbón, recordó que hace un año y medio que viene estudiándose su factibilidad por parte de expertos de Estados Unidos y que si es viable luego habría que hacer los proyectos de ingeniería y construirla, lo cual “llevará años. Hay posibilidad de encontrar petróleo y gas en la plataforma continental pero antes de 10 años no estaremos sacando nada. Es algo que lleva años, por tratarse de obras e inversiones gigantescas”, dijo.
Donde sí ha habido avances importantes, aunque la producción eléctrica es aún insuficiente para abastecer la demanda nacional, es a nivel de la producción de energías renovables, subrayó.
“En energía renovable el país en este gobierno batió récords de velocidad. En 2005 había cero megavatio de generación en energía renovable, aunque el tema estaba en montones de discursos y campañas electorales anteriores. Ahora, a final de 2009 vamos a pasar a ser el país de América --incluido Estados Unidos y Canadá-- con mayor capacidad instalada -en proporción al total producido- de generación eléctrica en base a energías renovables como biomasa y energía eólica”, añadió Martínez.
Por el momento fueron adjudicados tres proyectos de biomasa, dos en Tacuarembó en base a residuos forestales, uno en Rivera y otro en Paysandú, que también trabajarán con residuos forestales, y habrá otros de próxima adjudicación.
“Se han creado dos parques eólicos y a fin de año habrá alguno más funcionando”, dijo el ministro. En este sentido, el directorio de UTE resolvió multiplicar la capacidad de generación eléctrica de su parque eólico Sierra de los Caracoles, ubicado en el departamento de Maldonado. Con una inversión de 25 millones de dólares el ente espera contar con diez molinos ---actualmente dispone de cinco-- y 20 megavatios de producción diaria para fines de 2009 o en su defecto durante los primeros meses de 2010.
La intención de potenciar los proyectos de energía renovable se inscribe en el objetivo de alcanzar una generación diaria de entre 400 y 500 megavatios para 2015. No obstante, dada la situación actual, aseguró el ministro que “por un período más seguiremos dependiendo de lo que nos puedan brindar Argentina o Brasil a través de Argentina”.