Ante oposición a las tomadas inicialmente

Locales | 19 Abr Nuevas medidas de carácter restrictivo, que incluyen la prohibición de visitas a los pacientes internados, entraron en vigencia en la víspera en el Hospital Escuela del Litoral ante la posibilidad de una epidemia de dengue y el fracaso --por oposición del gremio de funcionarios y algunos usuarios-- de la adoptada inicialmente, que consistía en aplicar una insecticida en las puertas de ingreso del centro asistencial.
Ahora el equipo de gestión del Hospital informó a través de un comunicado que “no se permitirá el ingreso de vehículos automotores por el portón de calle Vizconde de Mauá, salvo ambulancias y móviles oficiales” y quedan suspendidas “hasta nuevo aviso” las visitas a pacientes internados. “Sólo se permitirá un acompañante por cama y los cambios de acompañantes y entregas de alimentos o ropa se realizarán en la portería del hospital”.
Por otra parte, los usuarios del Hospital sólo podrán acceder a sus instalaciones por la puerta de calle Montecaseros 520 y la del Servicio de Urgencias.
El área de policlínicas y hall principal se fumigará durante la noche y previo al ingreso de los usuarios, en las primeras horas de la mañana, con insecticida mata mosquitos.
Por otra parte, se solicitó la colaboración de los usuarios para que antes de ingresar al hospital se apliquen repelente o jugo de limón y rocíen su ropa con insecticida mata mosquitos.
“Esperamos contar con la colaboración de todos, para acatar las indicaciones de los servicios de salud, convencidos de que lo más efectivo, más fácil y más barato es prevenir esta enfermedad”, finaliza el comunicado.
RUMOR HIZO FRACASAR MEDIDA ANTERIOR
Consultada al respecto, la directora del Hospital, doctora Salomé Wollman, dijo a EL TELEGRAFO que este nuevo conjunto de medidas debió adoptarse tras el fracaso de la medida de barrera adoptada inicialmente, que era “la aerolización de las personas que ingresaban por las dos puertas de entrada y la emergencia del Hospital”.
“Durante la semana de Turismo y durante algunos días después estuvo vigente esa medida. Se utilizó un insecticida común para mosquitos y la instrucción impartida fue formar una nube en la puerta y que la persona pasara a través de ella. La medida fue aplicada durante unos diez días pero de pronto comenzó a correrse el rumor de que era tóxico y la gente se podría enfermar. A pesar que a nadie le pasó nada ni hubo consultas por ese motivo, nos vimos en la necesidad de dejarla de lado”, expuso.
“Fue una lástima, porque era una buena medida de barrera que nos permitía seguir trabajando sin cambiar el funcionamiento del Hospital”, dijo la jerarca, al lamentar que en un momento en que “todos deberíamos estar colaborado en la prevención ocurran estas cosas”.
Sin embargo, reconoció que en algunos casos la medida no fue bien aplicada y hasta se llegó a poner insecticida en la suela de los zapatos o rociar directamente a las personas en lugar de formar una “nube” en la puerta y que luego las personas pasaran por ella.
Independientemente de esto remarcó que “no hubo ningún caso de intoxicación ni pacientes que hayan consultado por molestias. No obstante, en este momento la gente está sensible a las alarmas y tuvimos que abandonar esa medida”.
Como se informó oportunamente, la gremial de funcionarios del Ministerio de Salud Pública planteó al Hospital la suspensión de la fumigación en puerta, argumentado que dicha acción generó alergia en algunos funcionarios y usuarios.
“No es simpático
pero debemos proteger
a los pacientes”
La doctora Wollman sostuvo que aunque las nuevas medidas no resulten simpáticas, son necesarias y que ante la posibilidad del inicio de una epidemia de dengue en nuestro país el Hospital debe priorizar la protección de los pacientes internados.
“Como no podemos dejar de proteger la salud de nuestros pacientes internados, tuvimos que instrumentar nuevas medidas que son restrictivas y nos van a traer algún problema, porque sí afectan el funcionamiento del Hospital, además de otras ya tomadas, como la colocación de mosquiteros y la fumigación del área perimetral del Hospital”, explicó.
No obstante, se mostró firme respecto a las nuevas resoluciones y dijo que prefiere que la critiquen “por adoptar medidas restrictivas y no porque no existan medidas para evitar que el mosquito o el dengue ingresen al Hospital”.
Respecto a las instrucciones de Salud Pública sobre la adopción de medidas en los hospitales, indicó que existe un protocolo impartido por ASSE que incluye la colocación de mosquiteros, la descacharrización de las áreas circundantes, aerolización y preparación de una sala con 3 camas para alojar pacientes con dengue.
No obstante, el Hospital local cuenta con una sala especialmente preparada con diez camas –y espacio para 15--, 100 tules y dispone también con stock de suero específico para atender los primeros casos de dengue que se puedan registrar en Paysandú.
“Las medidas que adoptamos están por encima de lo que exige el protocolo, pero más vale exagerar un poco y estar bien preparado”, añadió.