Rurales | 26 Abr Según informe del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), la producción de corderos de la primavera 2008 se estima inferior en 300.000 corderos respecto a 2007 --el descenso registrado el año pasado es de 8%--. En tanto, el de las ovejas encarneradas no pudo ser neutralizado por un incremento de la tasa señalada, lo que está significando una menor disponibilidad de corderos para el presente año.
El informe establece que la intensificación de las condiciones de sequía durante el verano presionó para una mayor oferta de vientres adultos y corderos, con el objetivo de aliviar la presión de pastoreo de los campos ganaderos y generando condiciones de baja de precios por una mayor presión de la oferta.
En el mercado de la carne ovina, la situación de la crisis financiera internacional también se vio reflejada en los principales mercados compradores de Uruguay. El precio de exportación de la carne ovina uruguaya en los primeros 75 días del año descendieron un 11% respecto a igual período del año anterior, según informó el SUL.
Todos estos acontecimientos generaron cambios en la ecuación económica de la invernada de corderos para 2009. En remates de ovinos por pantalla realizados en marzo, se registraron precios de corderos de reposición con niveles promedio de U$S 0,65 por kilogramo vivo para compradores, con valores de U$S 0,90 que fueron los vigentes un año atrás.
En forma paralela, en los comienzos del operativo cordero pesado 2009, los precios de la carne de cordero alcanzaron los niveles máximos de U$S 1,95 por kilogramo de carne, y significa un descenso de 13% respecto a los máximos de marzo 2008.
En materia de costos, la caída de precios de la energía y de los fertilizantes se reflejó en una reducción de 13% de los costos de implantación de praderas. Para el año 2009 respecto a 2008 se destacan algunos cambios, como el descenso del 28% en los costos de reposición de cordero y descenso de 13 % en los costos de implementación de pasturas. Esto será como consecuencia fundamentalmente de bajas en combustibles, fertilizantes, herbicidas y aumento de precios de las semillas, descenso de 13% en los precios de la carne de cordero y descenso de 32% en los precios de la lana.