Sequía influye negativamente

Locales | 05 May La presente zafra citrícola no se presenta con buenas perspectivas para el sector como consecuencia de la sequía que se manifiesta en la zona, evaluó el gerente de Azucitrus, Cr. Raúl Cancelo, quien a la vez señaló que la situación no es uniforme, ya que depende de la zona y que los establecimienos que cuentan con riego han registrado menos perjuicios por esta causa.
Sostuvo Cancelo que el mercado internacional “no está mal”, pero que debe tenerse presente que con la sequía que se ha manifestado y que todavía se mantiene, la falta de riego ha incidido notoriamente y que “en Azucitrus hubo lagos que se secaron el año pasado en octubre y no se han recuperado, en tanto la fruta necesita agua”.
“No va a ser un año bueno para el sector citrícola y Azucitrus debido a la falta de agua”, y “esperamos que empiece a llover en algún momento”, indicó, en tanto respecto a las exportaciones han empezado a salir variedades tempranas como la Tsatsuma. Acotó que esta fruta “está en buena condición, pero ya preocupa el grueso de la cosecha como consecuencia de la falta de agua”.
Este mes empieza a salir la naranja de ombligo, para continuar con las otras variedades, las que van a verse afectadas si no se revierte el déficit hídrico, evaluó. Acotó que es una situación que tiene denominador común para todos los productores citrícolas de la zona, sobre todo de los departamentos de Paysandú y Salto, donde se concentra el  grueso de la producción nacional en este sector. En el caso de quienes cuentan con agua para riego, el panorama no es tan comprometido, evaluó el empresario, y señaló que hay zonas en las que se han registrado volúmenes de lluvias superiores, que están en una situación distinta, y a la vez existen productores que han podido apelar al riego por contar con reservas importantes de agua con este fin.
Si bien no hay datos concretos sobre la situación en Salto, recordó que el año pasado en esta zona la situación tampoco fue buena para el sector citrícola, con altos costos de cosecha por mano de obra con aumento en dólares, por el alto precio de los combustibles y de transporte marítimo, en tanto el sector no se vio favorecido luego por la baja en los valores del petróleo, ya que estaba finalizando la cosecha.
Por otro lado, los emprendimientos citrícolas “se comieron” todos los costos altos de los insumos agrícolas, tanto de agroquímicos como de fertilizantes, porque la rebaja llegó tarde y se dio la  circunstancia de que muchos importadores del sector de fertilizantes compraron cuando los productos estaban caros.