Locales | 13 May La Intendencia de Paysandú continúa esperando la firma del convenio con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas, que tiene como objetivo concretar las mejoras a las que será sometido el edificio del ex Colegio Don Bosco. El convenio permitirá encarar el cronograma de obras que deben llevarse a cabo para que el edificio quede en condiciones de recibir las diferentes actividades previstas, aunque muy lejos quedaron los anuncios en cuanto a que el Colegio Don Bosco sería el Palacio de los Deportes.
Si bien tanto la Dirección de Promoción y Desarrollo como la Secretaría de Deportes esperan que las obras se inicien próximamente y queden listas al finalizar la primavera de este año, la realidad indica que todavía no hay fecha de inicio. Más allá de que las obras previstas solo abarcan el arreglo del techo y los desagües pluviales, que han generado más de un dolor de cabeza, la Intendencia tendrá que finalizar los trabajos antes del 4 de abril de 2010, fecha en que vencerá el contrato de comodato original, que tiene una validez de cinco años. Aunque la Intendencia está trabajando en una extensión con la Sociedad San Francisco de Sales, en el que estaría incluida la cesión del edificio por otros cinco años (finalizaría entonces el 4 de abril de 2015), la ejecución de las obras previstas resultará fundamental para extender el vínculo. Es que si los trabajos anunciados no están totalmente finalizados al 4 de abril de 2010, la Intendencia deberá entregar a los Padres Salesianos las instalaciones del ex Colegio Don Bosco, para que fijen un nuevo destino para el edificio. De lo contrario --es decir si las obras son finalizados antes de cumplirse el vencimiento del primer comodato--, el vínculo se extenderá.
“Según hablamos con el arquitecto en los últimos días, los trabajos a realizar serán en los 800 metros cuadrados de azotea y los cuatro desagües pluviales principales, así como algunos arreglos generales en el sector de alojamiento”, dijo el novel secretario de Deportes, Alfredo Gazzano. “Puede suceder que haya alguna pequeña modificación en algunas fechas, ya que si bien está muy próximo el inicio de las obras, estas aún no han comenzado”, agregó Gazzano.
El proyecto del Palacio de los Deportes fue anunciado apenas asumió Ruben Peña como secretario de Deportes. Durante su gestión se realizaron diferentes reuniones y anuncios con respecto al ex Colegio Don Bosco e incluso se hizo una consulta popular para definir el nombre con el que se lo denominaría.
Sin que surgieran novedades ni avances concretos luego de que se realizara el desalojo de quienes ocupaban el edificio --más allá de la limpieza realizada en las instalaciones--, Daniel Firpo, que luego estaría por algunos meses al frente de la Secretaría de Deportes, había señalado que no existía ningún proyecto destinado al ex Colegio Don Bosco, tirando por la borda todo lo anunciado anteriormente.
Ahora, después de varios años, parece que se ha encaminado la situación.
“La finalidad principal del comodato es revalorizar y conservar un edificio emblemático, mediante su utilización con actividades sociales, culturales y deportivas. Este edificio albergará a instituciones de diversas disciplinas del deporte sanducero, ya sea en salas de reuniones, congresos o como sede permanente de deportes de escasa difusión, actividades culturales varias, reuniones recreativas, clases del Instituto Superior de Educación Física (ISEF) y (servirá de) apoyo a programas de lucha contra distintos flagelos que afectan a nuestra sociedad”, dijo Gazzano.
Además, informó que “una vez finalizadas las obras se espera convertir al Colegio Don Bosco en un gran centro para hospedaje, previendo más de 90 alojamientos juveniles para delegaciones deportivas, congresos y eventos en general, y unos 10 de nivel con suites, incluyendo gabinetes higiénicos compartidos”. Por el momento, en las instalaciones de lo que iba a ser el Palacio de los Deportes solo se brindan clases del ISEF y se alojan unos pocos obreros que trabajan en el dragado del río Uruguay.